31 may 2022 , 21:21

Día del Niño: la desnutrición crónica no es la única deuda del Estado, el impacto de la pandemia y la violencia son otros problemas latentes

Víctimas de la delincuencia y de abusos, los menores son un grupo prioritario que se debe proteger cada día

La desnutrición crónica pone en riesgo la vida de los niños en el país. Esta condición, que afecta a uno de cada tres menores de 2 años en Ecuador, tiene como trasfondo situaciones de pobreza, donde los más pequeños no cuentan con acceso a agua potable ni a servicios de salud y vacunación oportuna, advierte el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), está presente en el país desde 1973.

Y aunque el presidente Guillermo Lasso ha abordado esta problemática y ofrecido fondos para palearla, esto no es lo único que aqueja a la población infantil y a sus padres, que este 1 de junio conmemoran el Día Internacional del Niño.

La guerra en Ucrania es otro factor que puede incidir en la desnutrición en Ecuador

En Ecuador, de casi 18 millones de habitantes, cerca de 6 millones son niños, niñas y adolescentes, según el Instituto de Estadística y Censos (INEC). En este país, el impacto del COVID-19 y la ola de violencia son otros problemas latentes "que no están en el imaginario del Gobierno", sostiene Sybel Martínez, activista de derechos humanos.

¿Cómo percibe la realidad de los niños en Ecuador? "Nefasta", así, en una sola palabra, la también vicepresidenta del Consejo de Protección de Derechos de Quito describe la situación de la niñez en el país.

Ella dice que durante la pandemia los niños han sufrido flagelos y afectaciones de derechos que no han sido reivindicados: se han incrementado los matrimonios infantiles, algo contra lo que Unicef ha venido luchando.

El incesto ya era un problema grave y durante el encierro por el COVID las agresiones sexuales se incrementaron, denuncia Martínez; "también está el embarazo adolescente y problemas de salud mental como la depresión y el aumento de casos de suicidio".

La mendicidad y el trabajo infantil también se han identificado en los sistemas de protección de derechos con un aumento sostenible.

Es que en Ecuador, 7 de cada 10 hogares con niños, niñas y adolescentes han visto reducidos sus ingresos y están experimentando mayores dificultades para acceder a alimentos nutritivos, según la encuesta ENCOVID, realizada por Unicef en octubre de 2021.

La pérdida de empleo afecta más a los hogares con niños

Se estima que a las familias con niños y niñas les tomará 11 años salir de la pobreza.

ACCESO A LA EDUCACIÓN

En Ecuador, según cifras de Unicef, casi dos tercios de los hogares del país carecen de conexión a Internet, lo que dejó a miles de niños sin acceso a herramientas de aprendizaje en línea durante la pandemia.

Las consecuencias no se hicieron esperar y están en conocimiento del Ministerio de Educación, que observa deficiencias en áreas fundamentales como lenguaje y matemáticas.

Según un estudio que realizó esa cartera de Estado, 5 de cada 10 alumnos presentaron inconvenientes en la resolución de problemas. Además, 4 de cada 10 niños tienen problemas de lectura.

Vacíos académicos, el otro costo de dos años de pandemia en Ecuador

Otro problema ha sido la deserción escolar, reconocida por las mismas autoridades: 252.000 niños, niñas y adolescentes estaban fuera del sistema educativo a diciembre de 2021.

En total, 4,3 millones de estudiantes fueron afectados en su aprendizaje y bienestar por el cierre de las escuelas durante dos años debido a la pandemia del COVID-19. Esos cierres tan largos no se vieron en Estados Unidos o países de Europa.

Clases presenciales: 130 planteles en la zona rural no están en condiciones

Y aunque en Ecuador no hubo clases presenciales durante dos años, al momento de abandonar la virtualidad para volver a las aulas, los menores se toparon con una realidad amarga: la infraestructura escolar que depende de los fondos públicos no esta al 100% óptima y sus maestros reclaman en las calles aumento de salarios.

Los que han vuelto, han sido víctimas de asaltos como el estudiante de Guayaquil o de agresiones sexuales como el caso de una menor abusada en un expreso en Quito.

SALUD Y NUTRICIÓN

En el país, como advierte Unicef, al menos uno de cada tres niños menores de 2 años tiene desnutrición crónica.

Eso convierte a Ecuador es el segundo país de América Latina y el Caribe con mayores índices después de Guatemala.

Por otra parte, tres de cada diez niños de 5 a 11 años tienen sobrepeso y obesidad.

ACCESO A SERVICIOS BÁSICOS

Uno de cada dos niños, niñas y adolescentes no cuenta simultáneamente con agua, saneamiento e insumos de higiene en sus hogares. La situación es más crítica para la niñez indígena del país: 8 de cada 10 niños y niñas indígenas carecen simultáneamente de estos servicios.

VIOLENCIA, VÍCTIMAS Y AGRESORES

Los niños no escapan a la ola de violencia que vive Ecuador en el último año. Solo en Guayaquil 407 expresos han sido asaltados en lo que va del año. En el último de los casos un menor recibió un disparo en la pierna, dentro del transportes que lo debía llevar a su escuela, cuando un asaltante intentó robarle el celular.

La acción de proteger es colectiva, pero el Estado es garante de derechos, recuerda Sybel Martínez. "Los niños deben ser protegidos porque son un grupo especial".

Y cuando se habla del Estado, no se refiere solo al Ejecutivo. Las demás funciones, como la Asamblea y órganos de Justicia, así como los distintos tipos de gobiernos descentralizados (los Municipios) también tienen la responsabilidad de proteger a los niños y adolescentes.

Por la falta de oportunidades y no tener una visión integral frente a la pobreza, algunos menores han sido coptados por la delincuencia que impera en el país.

Ser parte de la delincuencia es tan grave como ser víctima en el caso de los menores, pues es la evidencia de que, en esos casos, "no tienen otra alternativa" de vida.

A los tomadores de decisiones, sostiene Martínez, les hace falta voluntad política para poder implementar el sistema de protección de derechos en favor de los niños, para prevenir flagelos y no solo atenderlos. "Al final tenemos un pronóstico reservado de toda una generación que está enfrentando situaciones inimaginables en términos de vulneración de derechos".

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