Protestas internacionales en contra de Israel por su decisión de tomar Gaza

Miles de personas tomaron las calles de Tel Aviv este sábado 9 de agosto para exigir el fin de la guerra en Gaza, un día después de que el Gobierno israelí anunciara sus planes para ampliar el conflicto y tomar la Ciudad de Gaza.

Los manifestantes de Tel Aviv portaron pancartas y fotografías de los rehenes que permanecen en manos de Hamás, reclamando su liberación. Según la agencia AFP, las protestas congregaron a decenas de miles, mientras que representantes de las familias de los secuestrados cifraron la asistencia en cerca de 100 000 personas. La convocatoria superó a movilizaciones previas contra la guerra y estuvo marcada por mensajes directos al primer ministro Benjamin Netanyahu, advirtiendo que enfrentarán una presión social constante si los rehenes mueren durante la ofensiva.

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En Barcelona, el mismo sábado unas 2 500 personas salieron a las calles para denunciar lo que calificaron como “genocidio” en Gaza. La marcha, organizada por la plataforma Global Movement to Gaza, recorrió desde Plaza de Cataluña hasta la franja marítima, pasando por puntos emblemáticos como Las Ramblas. Los manifestantes, portando pancartas, banderas palestinas y haciendo sonar cacerolas, corearon consignas como “Gaza, no estás sola” y “No es una guerra, es un genocidio”. Además de la marcha, durante todo el día se realizaron actividades de sensibilización y protesta en distintos puntos de la ciudad.

Además, en Londres, la Policía Metropolitana de Londres informó que 532 personas fueron arrestadas este sábado durante una manifestación frente al Parlamento británico en rechazo a la guerra en Gaza y en apoyo al grupo propalestino Palestine Action, proscrito desde julio bajo la Ley de Terrorismo. La mayoría de las detenciones (522) se produjeron por portar carteles en respaldo a la organización, mientras que el resto obedeció a incidentes menores como obstrucción policial o agresiones sin heridos.

Las movilizaciones en Tel Aviv y Barcelona se suman a una ola de protestas internacionales que en los últimos días han exigido un alto el fuego inmediato. Diversas potencias extranjeras, incluidas algunas aliadas de Israel, han presionado para retomar las negociaciones, con el fin de liberar a los rehenes y atender la crisis humanitaria en la Franja. Sin embargo, Netanyahu se ha mostrado firme en su decisión, asegurando en redes sociales que no busca ocupar Gaza, sino “liberarla de Hamás”.

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Según cifras oficiales, de los 251 rehenes capturados durante el ataque de Hamás en 2023, 49 permanecen en Gaza, incluidos 27 que el Ejército israelí considera muertos. El conflicto, que se prolonga desde hace 22 meses, sigue generando reacciones de rechazo en distintos países, con manifestaciones que conectan a ciudades distantes en una misma exigencia: el fin de la guerra y el respeto a los derechos humanos de la población civil palestina.