El 10 de marzo de 1535, Tomás de Berlanga, obispo español, se convirtió en la primera persona en desembarcar en Galápagos.
- Imagen referencial de una tortuga navegando en las aguas de las islas Galápagos( )
Un día como hoy, 10 de marzo, pero de 1535, es decir, hace 490 años, el obispo español, Fray Tomás de Berlanga, se convertía en la primera persona en desembarcar en Galápagos, gracias a un desvío durante un viaje entre Panamá y Ecuador.
Tras este suceso, nadie exploró las islas Galápagos hasta 1546, cuando Diego de Rivadeneira, un conquistador español, arribó al archipiélago de forma accidental. 23 años después (1569), Mercator añadió las islas al mapa, y desde ese momento, la historia cuenta con una extensa serie de descubrimientos y desembarcos.
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Así se fueron desarrollando las Islas Galápagos
Entre los años 50, las islas se van consolidando con la presencia humana. A partir de los años 60 o 70 comienzan las acciones para usar a Galápagos como un espacio para el turismo.
La Islas fueron consideradas parte del territorio ecuatoriano porque ya se las ubicó como un espacio especial. Fue en 1832, en la presidencia de Juan José Flores, cuando las Islas Galápagos se anexaron al Ecuador.
María José Barragán Paladines, directora de Ciencias de la Fundación Charles Darwin, explica que "hace más de 200 años, se vio lo especial de Galápagos; esta no es una idea forzada. Hay que aceptar que Galápagos debe ser manejado de manera diferente. Ecuador es el custodio; eso significa que debe ser cuidado, protegido y tratado de manera diferente".
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