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Los bomberos de Cuenca y Girón se preparan para enfrentar una nueva temporada de incendios en Azuay
Tras los devastadores incendios de 2024, que consumieron más de 15 mil hectáreas en Azuay, los cuerpos de bomberos fortalecen su capacidad operativa con entrenamientos, nuevas brigadas y más equipo para responder en zonas rurales.
Azuay recibió un severo golpe en el 2024: 15 835 hectáreas de vegetación se consumieron en 802 incendios forestales. La segunda provincia con mayor afectación, solo por debajo de Loja. La época seca de este año arrancó y la amenaza de incendios vuelve, pero los bomberos dicen que se han preparado.
Cuenca tiene 400 bomberos, incluyendo voluntarios, y 60 de ellos forman la Brigada de Respuesta de Incendios Forestales, la única en el sur del país. Las alertas llegan a la estación 3, se apresuran a ponerse sus equipos y suben a los vehículos para atender las emergencias más complejas.
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En el 2024, el Cuerpo de Bomberos de Cuenca atendió 567 incendios forestales. Noviembre fue el mes más crítico, cuando hubo hasta 20 emergencias en un solo día. En una zona con una topografía con altas montañas y lugares de difícil acceso se necesita entrenamiento y equipo especial.
Ese entrenamiento arrancó en febrero en la Escuela de Formación Efraín Vásquez Talbot y han puesto a prueba piscinas, mangueras, bombas, vehículos y tiempos de respuesta, subiendo montañas y simulando las dificultades del 2024.
"Los incendios fueron en situaciones muy lejanas que se tenía que caminar entre cuatro a cinco horas para llegar al sitió", explicó Sixto Heras, jefe de bomberos
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El 2024 dejó claro que aunque tienen 402 bomberos, 108 vehículos y 13 estaciones, se necesitaron refuerzos. Desde enero formaron como brigadistas forestales a 800 personas en 25 comunidades rurales.
"Tanto el manejo de herramientas, equipo de protección es muy importante porque nuestros compañeros brigadistas son un soporte", dice Pedro Vidal, instructor
La Brigada de Incendios Forestales ha capacitado personal de otras provincias. Tienen 63 vehículos, además de una bodega con batefuegos, gorkys, sierras, bombas y más equipo. Han invertido USD 325 mil este año en reponer lo que se perdió en el 2024 y adquirir más.
Pese a esta preparación, Cuenca enfrenta retos como reducir el tiempo de respuesta en parroquias lejanas como Chaucha y Molleturo, donde solo llegar tarda hasta tres horas.
Pero si los bomberos de Cuenca tienen desafíos con un presupuesto de USD 13 millones anuales, en el cantón Girón es aún más difícil porque su presupuesto es de USD 325 mil.
Son apenas 12 bomberos y tienen una sola estación, sin embargo, no decaen y han buscado refuerzos este año capacitando a voluntarios.
"Y eso implica una inversión; equipo, radio, equipo de protección personal, seguros, uniforme. Cerca de USD 3 mil por bombero", menciona Christian Reyes, jefe de Cuerpo de Bomberos
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En Girón no hay brigada específica para incendios forestales, los 12 bomberos y 13 voluntarios atienden todas las emergencias y se han capacitado con el Cuerpo de Bomberos de Cuenca. Tienen 11 vehículos de los cuales tres necesitaban renovación, pero hasta ahora solo han adquirido uno, ahorrando durante tres años. Faltan dos más que ya cumplieron su vida útil, pero cambiarlos tardaría aún más por el costo.
"USD 500 mil más y nos tomará unos seis años porque es muy poco el presupuesto que se tiene", dice Christian Reyes, jefe de Cuerpo de Bomberos
Su estrategia para atender emergencias que los sobrepasan es aliarse con los bomberos de San Fernando, Nabón y Santa Isabel. Necesitan personal porque en Girón, si hay un incendio grande, no se puede atender otro ni responder a emergencias médicas.
"Nosotros somos dos por guardias, uno tiene que quedarse en el vehículo como sea para a manejar lo que son bombas y todo, mientras que la otra persona tiene que ir a apagar el incendio. Ayudan estudiantes que son pasantes y que no es ninguna responsabilidad de ellos meterse en esos incendios porque no tienen el equipo", explica Paola Ortega, bombera
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Han invertido USD 73 mil dólares para aumentar el stock de equipos y otros USD 10 mil dólares en recuperar las mangueras, bombas y más que se perdieron en los incendios del 2024.
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