Maduro acusa a Estados Unidos de intentar apoderarse de sus reservas petroleras con operaciones militares en el Caribe

Durante la más reciente reunión del Comité Ministerial de Monitoreo de la OPEP y OPEP+, Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, el gobierno venezolano presentó una carta del presidente Nicolás Maduro en la que cuestiona el despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe. Según el documento, esta operación representa un intento de presionar al país y podría tener efectos directos sobre el sector energético, clave para la economía venezolana. La comunicación fue dirigida al secretario general de la organización, Haitham Al Ghais.

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El texto, leído ante los delegados por la vicepresidenta Delcy Rodríguez, señala que las acciones estadounidenses constituyen una amenaza para la estabilidad regional y para el mercado internacional del petróleo. El gobierno venezolano sostiene que la presencia de personal militar y embarcaciones en la zona aumenta el riesgo de tensiones, especialmente en un contexto global marcado por la fragilidad de los suministros energéticos.

Maduro detalla en su carta la magnitud del operativo estadounidense e insiste en que este tipo de intervenciones puede generar desequilibrios en la producción de países petroleros, recordando episodios ocurridos en otras naciones de la región y del Medio Oriente. Para Venezuela, estas acciones representan una presión adicional sobre su industria, que continúa operando en medio de sanciones y restricciones financieras.

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El mandatario cerró su mensaje pidiendo a los miembros de la OPEP y OPEP+ mantenerse atentos ante posibles impactos sobre la seguridad energética internacional. También ratificó que su gobierno buscará preservar el control sobre sus recursos naturales y llamó al bloque petrolero a reforzar la cooperación para evitar que factores externos afecten la estabilidad del mercado.