Un sentenciado por narcotráfico estaba libre y volvió a caer en operativo contra red de envío de droga a España

Édison A.G., de 51 años, es considerado una de las figuras clave en la red de narcotráfico que desarticuló la Policía el jueves 29 de mayo de 2025. El operativo denominado Gran Fénix Dragón fue simultáneo en Guayaquil, Quito y España, y dejó 17 detenidos en total.

El caso comenzó con un decomiso de 165 kilos de cocaína en un contenedor aéreo con pitahayas que fue detectado en Madrid, España. Las Unidades de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de España inició un operativo de inmediato en agosto de 2024 y capturó a un argentino, un español y dos albaneses, quienes eran los encargados del aparataje logístico y de acopio de la cocaína.

Las investigaciones continuaron entre ambos países y se determinó que el grupo narco obtuvo el control de la cadena logística de estos cargamentos en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo, mediante el reclutamiento de funcionarios aduaneros y de empresas de seguridad y control de carga para el envío de droga.

En rueda de prensa, el coronel Francisco Zumárraga señaló que la organización delictiva tenía vínculos con el grupo criminal Los Chone Killers, que opera en el cantón Durán. También con la mafia albanesa.

De hecho, en los allanamientos en España, dos albaneses fueron capturados.

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Tres de los sospechosos ya tenían antecedentes penales. Édison A.G., una de las piezas clave en la red y presuntamente encargado de enviar la cocaína- fue capturado en 2018 por un caso de tráfico de drogas.

Según consta en la página de la Función Judicial, fue detenido en Manabí cuando iba como copiloto en un vehículo vino. Allí, las autoridades detectaron casi una tonelada de cocaína.

Édison A. fue llevado a juicio donde un juez lo sentenció a 10 meses de prisión y al pago de una multa de cuatro salarios básicos unificados, que en ese tiempo era de USD 386. Es decir, en al cumplir su condena, debía pagar USD 1 544.

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Ecuavisa.com conoció que otros de los detenidos era un funcionario de la Agencia de Tránsito de Durán (ATD). Por eso, se atribuye que la red tenía nexos con Los Chone Killers y con el cabecilla Julio Martínez Alcívar, alias Negro Tulio.

Se trata de Enrique C. V. Él ya había sido detenido en agosto de 2024, cuando las autoridades allanaron las dependencias municipales de Durán por un caso de delincuencia organizada. Sin embargo, Enrique C. fue procesado por tenencia de armas.

En este nuevo proceso, su defensa ingresó un informe médico de 22 páginas señalando que Enrique C.V. tiene una enfermedad crónica renal.

Así mismo, hay otra persona que fue funcionaria municipal pero del cantón Mocache, en Los Ríos. En la página de la Función Judicial, solo consta que tiene contravenciones.

Además de ellos, hubo tres policías capturados de 23 y 33 años de edad. Son un cabo primero, un cabo segundo y un policía. Aunque no se precisó el rol de ellos en la cadena delictiva, el comandante general Pablo Dávila se pronunció en redes sociales.

Dávila sostuvo que la aprehensión de los tres uniformados "evidencia el firme compromiso de la Policía Nacional del Ecuador con la transparencia y cero impunidad a la corrupción, primando ante todo la integridad institucional a través de un proceso permanente de autodepuración interna".

Según las investigaciones, la red contaminaba contenedores aéreos. Para ingresar la droga, tenían nexos empresariales que simulaba el comercio ilícito de frutas exóticas como pitahaya, maracuyá y naranjilla.

También tenían el control de la cadena logística y reclutaban empresas de seguridad que podían acceder a la terminal aérea. Entre los 13 detenidos también habría funcionarios de la Aduana que facilitaban la salida de la droga.

Al llegar la mercancía ilícita a España, los albaneses eran los encargados de distribuir la droga en ese país y en el resto de Europa. Ecuavisa.com consultó a un agente antinarcóticos si era red albanesa respondía a Dritan Gjika, pero dijo que no, que no tenía relación con el capo regional capturado en Emiratos Árabes el 27 de mayo de 2025.

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