Alias Pipo de Los Lobos, cuya muerte fue desmentida tras su captura en España, defiende su certificado de defunción

Wilmer Chavarría, alias Pipo, máximo cabecilla de Los Lobos, detenido el domingo en España, defiende su certificado de defunción en Ecuador.

Su abogado pidió al tribunal de Azuay, que anuló la extinción de su pena tras confirmarse que está vivo, que aclare si hay trámite del Registro Civil o sentencia judicial que estipule la nulidad del acta de defunción por existir informacion falsa.

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Y que si hay pericia que determine que el formulario del INEC, clave para inscribir la defuncion, fue falsificado. Con ello buscan dilatar un pedido de extradición a Ecuador.

Pero alias Pipo no es el único capo criminal que fingió su muerte para seguir operando desde la clandestinidad. Antes lo hizo Leandro Norero, alias El Patrón, quien era financista de bandas Los Lobos, Tiguerones y Chonekillers, que operaban con el cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Él fue el primero en aprovechar la pandemia del COVID para fingir su muerte en 2020, y así evadir un pedido de extradición de Perú, donde enfrentaba un proceso por narcotráfico.

Él siguió operando en Ecuador y usaba documentos falsos. Fue detenido en 2022 por lavado de activos y meses después fue asesinado. Según los chats y testimonio de Mayra Salazar, fue Norero quien llevó a alias Pipo a seguir su camino y financió su certificado de defuncion por COVID, cambio de rostro e identidad.

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Aún hay otro cabecilla, también de Los Lobos, que es investigado por la Fiscalía por el uso de documentos falso para fingir su muerte. Se trata de Julio Sánchez Salavarría, alias Sianca, sentenciado por el asesinato del general de la FAE Jorge Gabela en 2010, quien a inicios de este año logró la extinción de esa y otra pena, presentado un certificado de defunción.

Él es financista y cabecilla de Los Lobos. Y según el testimonio en el caso Villavicencio de Marcelo Lasso, compañero de celda de Norero, está vivo. Él dijo a la Fiscalía que tiene su base en el barrio Garay de Guayaquil, pero la Policía cree que está fuera del país y ahora, al ser potencial sucesor de alias Pipo, se convierte en un objetivo de alto valor para la fuerza pública.