El modelo de flagrancia de Pichincha es evaluado por la Judicatura para implementarlo en el país

Una visita sorpresa realizó el presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), Mario Godoy, en las instalaciones de la Unidad de Flagrancia de Pichincha, en donde también opera la Unidad Especializada en Violencia contra la Mujer y Miembros del Núcleo Familiar, en Quito.

Lo hizo para ver y analizar el modelo de gestión implementado en esta dependencia, para así generar insumos técnicos que permitan mejorar y replicar este esquema a escala nacional.

Verificó el estado de la infraestructura y los recursos tecnológicos disponibles para el personal. Asimismo, Godoy mantuvo un intercambio directo con jueces y secretarios del turno nocturno, para conocer sus requerimientos y proponer soluciones inmediatas.

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Inspeccionó los espacios de primera acogida, la coordinación de partes policiales, los accesos diferenciados para víctimas y presuntos agresores, los puntos donde operan los fiscales, los despachos judiciales de turno, las salas de audiencia y la Unidad de Aseguramiento Transitorio.

La Unidad de Flagrancia de Pichincha se caracteriza por un modelo organizativo que articula de forma eficiente a la Policía Nacional, el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), fiscales y jueces, garantizando una respuesta ágil y efectiva.

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