Ciudadanos de Otavalo, Urcuquí e Ibarra piden paz, diálogo y libertad para trabajar

Una mujer de la tercera edad fue agredida por un indígena en Otavalo durante el décimo tercer día de paro nacional. Sucedió la mañana de este sábado 4 de octubre en la ciudadela Imbaya, donde sus moradores decidieron salir a la calle y enfrentar a los manifestantes, que armados con palos y puntas afiladas de acero, una vez más, les exigían cerrar sus negocios.

Los habitantes de la ciudadela impidieron el paso de los comuneros, quienes tuvieron que retroceder.

A pocas cuadras del lugar, un grupo de manifestantes intentó quitarle la mercadería a una mujer indígena que transitaba por la zona intentando vender sus productos.

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También en Urcuquí, un grupo de ciudadanos se organizaron y llegaron al sector de Coñaquí para habilitar la vía Ibarra–Imbaya–Urcuquí, que durante las protestas ha sido bloqueada en al menos cinco ocasiones por comuneros de Imantag de Cotacachi.

Vestidos de blanco y con banderas del mismo color, retiraron escombros y limpiaron la vía con agua.

“Cada paralización nos deja más pobres. Nos quejamos de la pobreza, pero nosotros mismos hacemos esto para estar más pobres”, dijo un habitante.

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Mientras en Ibarra, un grupo de comerciantes organizó un plantón en el obelisco de la ciudad para exigir paz, diálogo y trabajo. También con banderas blancas, rechazaron el bloqueo de las vías conectan a Imbabura con el sur del país.

“Se rompió la cadena de pagos. Nadie compra, nadie vende. Nadie produce, no hay consumo”, dijo un ciudadano.

Estas manifestaciones en contra del paro se suman a los eventos registrados antes en Natabuela de Antonio Ante y San Antonio de Ibarra.

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