30 abr 2025 , 18:50

La economía de EE. UU. registra su peor trimestre desde 2022 y se acerca a una recesión

El primer trimestre del 2025 muestra una caída del PIB, generando inquietud sobre el futuro económico de Estados Unidos.

   

La economía de Estados Unidos se ha visto gravemente afectada en el primer trimestre de 2025, registrando una caída de 0,3 % en el Producto Interno Bruto (PIB), marcando su peor desempeño desde 2022.

Esta desaceleración se produjo en medio de las controversiales políticas económicas implementadas por el presidente Donald Trump, que, lejos de aliviar la situación, parece haber intensificado los desafíos económicos del país. Aunque el mandatario atribuye la caída a las políticas de su predecesor, Joe Biden, los analistas advierten que los aranceles impuestos por Trump podrían estar comenzando a pasar factura.

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La desaceleración económica: exportaciones, importaciones y consumo bajo presión

El Departamento de Comercio de EE. UU. reveló que la desaceleración del PIB se debió principalmente a un aumento significativo de las importaciones (41,3 %) y una reducción del gasto público (-5,1 %) durante el primer trimestre.

Las importaciones fueron un factor clave que afectó negativamente el balance comercial de EE. UU., contribuyendo a una reducción del crecimiento económico. La diferencia entre importaciones y exportaciones fue la mayor registrada desde 1947, lo que afectó gravemente las proyecciones de crecimiento.

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En paralelo, el gasto de los consumidores, que representa aproximadamente el 70 % de la economía estadounidense, también se desaceleró drásticamente, alcanzando solo un 1,8 % de crecimiento, mucho menos que el 4 % registrado en el trimestre anterior.

Aunque el gasto empresarial aumentó un 9,8 %, lo que indica una posible anticipación ante los aumentos de precios debido a los aranceles, los datos sugieren que el panorama a corto plazo es preocupante.

El impacto de la política arancelaria de Trump

Los aranceles impuestos por Trump durante los últimos meses han generado una gran incertidumbre tanto en los consumidores como en las empresas estadounidenses. Los aranceles sobre productos de China y otros países han alterado el comercio internacional, y aunque Trump ha defendido su enfoque como una forma de reestructurar el comercio mundial, los resultados no han sido positivos.

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Según algunos economistas, el impacto de la guerra comercial podría desencadenar una recesión si las tensiones comerciales siguen escalando. Sin embargo, Trump ha insistido en que la culpa de la caída económica no es de sus políticas, sino de las "malas cifras" heredadas de Biden. En una reciente publicación, Trump declaró:

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“Esto tardará un poco, no tiene nada que ver con aranceles, solo que nos dejó con malas cifras, pero cuando comience el auge, será como ningún otro. ¡Tengan paciencia!”

La escasez del empleo: señales de alerta en el mercado laboral

Además de la caída del PIB, los datos de empleo también apuntan a un futuro incierto. En abril, el crecimiento de empleo en el sector privado estadounidense se desaceleró drásticamente, con solo 62 mil empleos creados, muy por debajo de las expectativas y de los 147 mil empleos creados en marzo.

Los expertos coinciden en que, aunque no se puede hablar aún de recesión, la incertidumbre política y económica está afectando las decisiones de contratación y la confianza empresarial.

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