Caso Pitahaya: empresario viajó desde España a Ecuador para acordar envío de cocaína

Casi tres meses después de un operativo binacional para desarticular una red de narcotráfico, surgen nuevos detalles. En el denominado caso Pitahaya, 13 personas, incluyendo tres policías antinarcóticos, fueron detenidas y procesados por tráfico.

De acuerdo a las autoridades, los sospechosos enviaban bloques de cocaína vía aérea, camuflados en cargamentos de Pitahaya que salían desde el Aeropuerto de Guayaquil hacia España. Un decomiso de 165 kilos de droga en medio de la fruta, detectado en Madrid, dio origen a la investigación.

En la etapa de instrucción fiscal -que finaliza el 29 de agosto- una persona rindió su versión libre y voluntaria, además de entregar un teléfono.

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Ecuavisa.com revisó el expediente y la declaración. Según el documento, en 2024 hubo el contacto entre la empresa productora de fruta con el supuesto dueño de una compañía de España vía electrónica. El hombre viajó a Quito y tras las verificaciones de que era "una compañía de gran trayectoria", se exportó el primer cargamento de pitahaya en julio de ese año, en cajas de 2.5 kilos desde el Aeropuerto Mariscal Sucre.

La siguiente temporada de exportación era en agosto. Los productores enviaron una proyección para enviar 3 600 kilos de fruta y las fechas de entrega. Pero -de acuerdo al documento- la empresa de España sostuvo que su cliente en Europa tenía otros requerimientos y debían "cambiar las cajas y que la carga iba a salir del aeropuerto de Guayaquil".

Según la empresa extranjera, la pitahaya debía ser empacada en cajas de 20 kilos y la coordinación del envío debía ser con Tito Z. (uno de los procesados). El implicado creó un grupo de Whatsapp donde añadió al representante español, a una agente de España y dos mujeres de una empresa carguera en Guayaquil.

Tito Z., alias El Ingeniero, indicó a qué empresa se debían comprar las cajas de cartón, que fueron traídas desde El Carmen, Manabí. Con él supuestamente se coordinó el camión y transportista que debía llevar la fruta hasta el Aeropuerto José Joaquín de Olmedo.

Según la Policía, en la terminal se habrían evadido controles con complicidad de tres agentes. Así se logró enviar el cargamento a Madrid, donde un argentino y una española retiraron la mercancía.

Las investigaciones determinaron también que la red tenía vínculos con el grupo criminal Chone Killers, pues dos de los procesados estuvieron implicados en un proceso de delincuencia organizada de la red de alias Negro Tulio. También había nexos con la mafia albanesa, dos ciudadanos de esa nacionalidad fueron detenidos en España.

En Ecuador, cinco de los 13 detenidos apelaron a la prisión preventiva que dictó un juez. Dos de ellos eran policías que realizaban los controles antinarcóticos en el aeropuerto. Sin embargo, el juez de la causa rechazó la medida.

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Las cajas de cartón usadas para enviar la pitahaya fueron clave para la identificación de cuáles tenían droga. Así se reveló en la audiencia de formulación de cargos.

Durante las investigaciones, se detectaron conversaciones sobre instrucciones especificas del control aeroportuario en Guayaquil. Los tres policías implicados tenían que poner atención al número "77777", mientras que las cajas con números 9, 10 y 11 eran las consideradas "premiadas".

En uno de los diálogos, se señaló que debían verificar "el 7 arriba y abajo. Y que por favor esté arriba, porque abajo estaban el 11, 10 y 9 porque iban premiadas". Es decir, contaminadas con los bloques de cocaína.

Aquí, los agentes antinarcóticos implicados jugaron un rol importante en los controles de los contenedores. Según el expediente, los uniformados supervisaron la carga en 49 segundos, cuando el procedimiento con perros adiestrados tarda aproximadamente nueve minutos.

Con las grabaciones de las cámaras de seguridad del área, los investigadores compararon la revisión del cargamento contaminado con otros procedimientos anteriores. Por eso, la Fiscalía sostiene que "los funcionarios tenían conocimiento de lo que contenían los contenedores y que lograron evadir los controles para permitir la exportación de tres contenedores de pitahaya".

Como parte de la instrucción fiscal, se dispuso la explotación de los celulares incautados en el megaoperativo del 29 de mayo de 2025 en Guayaquil, Quito y España. Cuando concluya esta etapa, el fiscal solicitará fecha para la audiencia preparatoria de juicio.

Los sospechosos se identificaban entre sí con alias. Franco, Lucho, Mantas, Ingeniero, Chico, Gran, Toyo, Cholo, Flaco, Chofer, JC, Ronny, Dani, Andy, Muñeca, Yuca, Pul y Negro. De acuerdo al expediente también consta los alias Compadre, Comadre y Yandri.

Este último coincide con el nombre del hermano de Fito, Yandri M., que fue detenido en junio por lavado de activos. Sin embargo, la investigación no precisa de quién se trata y si la organización tenía vínculos con Los Choneros para el envío de droga vía aérea hacia España.

El expediente revela que algunos de los implicados usaban números extranjeros para las comunicaciones y la coordinación. Los teléfonos eran de Estados Unidos y España.

Entre una de las conversaciones, los implicados hablaban sobre las guías aéreas, permisos de importación. Además de códigos de las cajas que eran consideradas 'premiadas' (tenían la droga). También se mencionó la cantidad de USD 10 000 como parte del gasto logístico.

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