Los clubes Independiente del Valle y Liga de Quito entran en acción esta semana en las copas Sudamericana y Libertadores.
Liga de Quito e Independiente del Valle, dos clubes que ya saben lo que es levantar trofeos continentales, vuelven a ponerse bajo los reflectores de la Conmebol esta semana, en cuartos de final, llevando en sus espaldas la ilusión del país.
Independiente del Valle, primero en saltar a la cancha, recibirá esta noche a Once Caldas por la Copa Sudamericana. Los rayados no solo lideran la liga local con autoridad, sino que parecen tener un romance eterno con este torneo: ya lo ganaron en 2019 y 2022, y no se cansan de perseguirlo.
Bajo la conducción de Javier Rabanal, el equipo mantiene esa mezcla de disciplina y ambición que lo ha convertido en referente de la región. Eso sí, no tendrá una cita sencilla: enfrente estará Dayro Moreno, máximo artillero del certamen, un delantero que ha hecho del gol una costumbre.
Pero si algo ha demostrado IDV es que la experiencia copera pesa, y que la convicción suele marcar diferencias.
Del otro lado, en la Libertadores, se asoma Liga de Quito. El único club no argentino o brasileño en pie en esta edición —dato nada menor— se enfrentará mañana a Sao Paulo con la memoria viva de 2008.
Tiago Nunes y sus dirigidos ya sorprendieron dejando fuera al campeón vigente, Botafogo, y ahora buscan repetir la hazaña ante un tricampeón continental. Dicen que la altura de Quito es su aliada, pero la verdadera fortaleza de Liga está en su capacidad de creer en sí misma cuando todos la miran como “la excepción”.
La Libertadores y la Sudamericana no esperan. No se trata únicamente de avanzar de ronda, sino reafirmar que nuestro fútbol tiene madera para seguir soñando. Y esta semana, por fortuna, Ecuador juega dos partidos en los que convertir el sueño en realidad es algo posible, porque ya ha pasado.
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