16 nov 2023 , 12:27

Caldo de huesos, la receta definitiva para obtener colágeno natural

Este caldo aprovecha los nutrientes presentes en los huesos de los animales.

Imagen referencial de un caldo ( Freepick )

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El caldo de huesos, un plato que aprovecha hasta la última parte de los alimentos, es un plato que no es difícil de preparar, y que además es abundante en minerales y nutrientes que benefician tu salud, tanto general como a nivel de articulaciones gracias a su elevado contenido de colágeno y otros compuestos como el calcio, fósforo, magnesio y potasio.

Gracias a ello es que este caldo se suele utilizar como remedio casero para ciertas dolencias articulares y relacionadas a los huesos. Continúa leyendo para saber que beneficios te trae este caldo y como puedes prepararlo.

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Cocinar este caldo requerirá bastante paciencia

Los huesos contienen numerosas proteínas que son útiles para que nuestro cuerpo pueda regenerar células óseas, además de facilitar el tránsito intestinal e incluso teniendo propiedades protectoras del sistema nervioso y un papel importante en la conciliación del sueño según estudios llevado a cabo por equipos de la National Institute of Health.

Entre los principales nutrientes presentes en este caldo, tenemos los siguientes:

Los huesos son ricos en colágeno, crucial para la estructura del cuerpo.

La gelatina, que al enfriarse el caldo, proporciona una dosis adicional de colágeno.

Glicosaminoglicanos, los cuales son cruciales para la salud de los tejidos conjuntivos y articulaciones.

La glicina es esencial para la síntesis de colágeno y útil en situaciones de lesiones e inflamación.

La prolina es vital para regenerar la piel, sanar heridas y el sistema cardiovascular.

La glutamina ayuda en el funcionamiento de las células intestinales y el sistema inmunitario.

Los huesos son ricos en minerales como calcio, magnesio, cobre, hierro, manganeso, etc.

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¿Cómo lo preparo?

Para preparar este caldo, y obtener beneficios nutricionales, es esencial cocinar los huesos durante al menos 24 horas, para lo cual puedes recurrir a las ollas de cocción lenta como una opción eficaz y segura. Además, se sugiere agregar vinagre de manzana o limón para optimizar la extracción de minerales durante la preparación del caldo casero. Para preparatlo bastará con seguir estos pasos:

Coloca exclusivamente los huesos en una olla grande con vinagre de manzana.

Llena la olla con agua, tápala y espera a que hierva.

Cuando hierva, destapa y elimina la espuma de la parte superior.

Reduce el fuego y deja hervir a fuego lento por al menos 14 horas (preferiblemente 24).

Agrega agua según sea necesario para mantener el nivel.

Cuela el caldo, retira y desecha los huesos.

Añade las verduras y cocina durante 1 hora adicional.

Cuela nuevamente el caldo y ajusta la sal según preferencia.

Deja enfriar el caldo y guárdalo en la nevera por hasta 5 días o en el congelador por hasta 3 meses.

Se recomienda dejar el caldo ligeramente insípido para facilitar futuras preparaciones sin preocupación por el exceso de sal.