14 may 2025 , 07:03

Marcela Aguiñaga se distancia de Rafael Correa y se replantea abandonar la Revolución Ciudadana

"Yo misma me he calificado como la oveja negra de la Revolución Ciudadana (...), por no estar de acuerdo con lo que piensa Rafael Correa en este momento", señaló en Contacto Directo.

   

La prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, quien cumple dos años en el cargo y que llegó a ese puesto auspiciada por la Revolución Ciudadana (RC), se replantea su permanencia en ese movimiento político. Así lo dio a conocer este miércoles 14 de mayo durante una entrevista en el programa Contacto Directo.

Aguiñaga admitió públicamente su desacuerdo con el rumbo que ha tomado la organización liderada por el expresidente Rafael Correa, quien en los últimos días ha cuestionado a varias autoridades locales vinculadas al correísmo, entre ellas a la propia prefecta, por no apoyar la teoría del "fraude" en los resultados de las elecciones presidenciales del domingo 13 de abril.

Lea también: Las figuras del correísmo reconocen los resultados y se alejan de la teoría de fraude de Luisa González

En ese sentido, la funcionaria expresó:

Quote

"Yo misma me he calificado como la oveja negra de la Revolución Ciudadana por tener una voz disonante, por no estar de acuerdo con lo que piensa Rafael Correa en este momento. Quizás hay momentos en los que uno tiene que replantearse cosas".

El dragado del río Guayas

La semana pasada, la administración de Aguiñaga decidió terminar de forma unilateral el contrato para el dragado del río Guayas, firmado por su antecesora, Susana González. La medida se tomó luego de que el consorcio Dragando por Guayas, encargado de extraer sedimentos y depositarlos en terrenos de Durán, superara el límite permitido de multas contractuales, según informó el Gobierno Provincial.

Pese a la terminación del contrato, Aguiñaga reconoce que durante los trabajos se logró extraer más de cuatro millones de metros cúbicos de sedimentos del lecho del río, lo que permitió recuperar la navegabilidad en un tramo cercano al islote El Palmar. Sin embargo, advierte que el río Guayas sufre una "sedimentación agresiva" y que su dragado debe ser permanente.

Imagen de la draga que fue instalada junto al islote El Palmar. El contrato del dragado fue terminado de manera unilateral por la administración de Marcela Aguiñaga.
Imagen de la draga que fue instalada junto al islote El Palmar. El contrato del dragado fue terminado de manera unilateral por la administración de Marcela Aguiñaga. ( )

Ante esta realidad, la Prefectura del Guayas impulsa una visión más amplia y regional. Aguiñaga, junto con sus homólogos de Bolívar, Los Ríos, Chimborazo, Manabí, Cotopaxi, Cañar y Santo Domingo de los Tsáchilas, ha conformado una mancomunidad para ejecutar obras de gran escala en toda la cuenca hídrica del río Guayas.

Esta cuenca, la más extensa del país, está compuesta por ríos, esteros, afluentes y subcuencas que drenan sus aguas hacia el río Guayas, desembocando en el Golfo de Guayaquil. Su influencia abarca una vasta zona del occidente ecuatoriano y es clave para la agricultura, la seguridad hídrica y el desarrollo productivo del país.

Revise además: La exprefecta del Guayas, Susana González, defiende el dragado y niega falsas promesas

Según Aguiñaga, los proyectos iniciales contemplan una inversión de 50 millones de dólares, además de una asistencia técnica de USD 400 000. La estrategia es financiar estas obras a través de organismos multilaterales, dada su magnitud y carácter interprovincial. Y, con el tiempo, impulsar un canje de deuda por naturaleza.

La prefecta aseguró que durante los dos años que restan de su mandato se continuará con las labores de dragado. Una de las propuestas para financiar esta fase es la monetización del material extraído o la venta de los terrenos rellenados con sedimento en Durán, que son propiedad de la Prefectura. Estos predios, dijo, tienen potencial para un futuro desarrollo urbanístico.

Noticias
Recomendadas