Vientos de más de 60 kms. por hora arrancaron techos y destruyen cultivos en Guaranda
Los habitantes de la parroquia San Luis de Pambil, sorprendidos por la magnitud del vendaval, vivieron momentos de angustia.
Un vendaval de más de 60 kilómetros por hora azotó la parroquia San Luis de Pambil, en Guaranda, provincia de Bolívar, provocando graves daños materiales y dejando a cientos de familias en una situación de emergencia.
Los vientos destruyeron techos, arrancaron postes de energía y arrasaron con cultivos, dejando un panorama desolador en toda la zona. La tormenta, que se desató con gran fuerza, afectó principalmente al centro de la parroquia, donde los daños fueron más severos. Las calles quedaron intransitables debido a las planchas de zinc, cables caídos y estructuras rotas que bloqueaban el paso.
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Los habitantes, sorprendidos por la magnitud del vendaval, vivieron momentos de angustia. Según testimonios de los vecinos, como el de Roxanna Coronel, el viento creó un remolino que arrasó con todo a su paso.
Los techos volaron por los aires, desplomándose sobre viviendas, negocios y carreteras. Ante esta situación, las personas solo pudieron correr y buscar refugio, ya que el vendaval era impredecible y extremadamente violento.
El impacto fue tan grande que la parroquia quedó sin electricidad durante más de 12 horas debido al colapso de los postes de energía eléctrica. Este corte de suministro agravó aún más las dificultades de los afectados, quienes, desde tempranas horas de este martes 11 de marzo, comenzaron a limpiar los escombros y a recuperar lo poco que quedó en pie.
Propietarios de viviendas y negocios trabajaron arduamente para reparar techos y salvar lo que fuera posible. La falta de luz dificultó las labores de rescate y la evaluación de los daños en la zona.
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En la zona rural, la situación no fue menos grave. En el sector La Playita, las plantaciones de banano fueron arrancadas de raíz, mientras que en las viviendas, la lluvia empapó muebles y pertenencias al quedarse sin techos. Shirley Salvatierra, una de las afectadas, relató que toda su ropa, colchones y muebles quedaron mojados por la lluvia.
Se estima que al menos 300 familias han sido afectadas por el vendaval en San Luis de Pambil, enfrentando una situación crítica que requerirá de ayuda inmediata para su recuperación.
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