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Esto afectará directamente los servicios de salud y en mediano plazo a los fondos de pensiones
La deuda del gobierno con el IESS se acumula y los problemas crecen. En este 2024, hay un desfase de USD 567 millones en el presupuesto, entre lo que pide el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y lo que el Gobierno otorga para cubrir el fondo de invalidez, vejez y muerte.
En una resolución del IESS, correspondiente al pasado 1 de febrero, se indica que en caso de que el Estado no contribuya con la totalidad de los valores solicitados, el IESS puede recurrir a las desinversiones y esto tendrá efecto a mediano y largo plazo.
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“Ha venido descapitalizándose y desinvirtiendo, por ejemplo, lo que tiene en el banco del IESS. Es una práctica que no es sana”, dijo Rodrigo López, docente de economía de la Universidad San Francisco (USFQ).
El IESS calcula que esas desinversiones sumen 1 408 millones de dólares. No tiene garantías de que el Estado le pague incluso lo presupuestado. Por eso, el IESS lanzó otra alerta: le tocaría aumentar la desinversión, lo cual comprometería seriamente la sostenibilidad de los fondos prestacionales.
El caso se puede agravar: el IESS informó que, este año, el Estado no incluyó dentro de su proforma valor alguno para el seguro de salud individual y familiar. “Desde ya tienen problemas con el pago a prestadores. Las clínicas y fundaciones están con ese problema de que no reciben pagos del IESS y les están obligando a cortar el suministro de prestaciones o derivaciones”, enfatizó López.
A esto se suma la falta de medicinas e insumos que denuncian los pacientes.
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