México acepta aviones de deportados de EE. UU. y sugiere a Latinoamérica diálogo ante Trump

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, informó que durante la primera semana del segundo mandato de Donald Trump se recibieron en México más de 4 000 personas deportadas, principalmente mexicanas, como parte de las políticas migratorias impulsadas por el mandatario estadounidense.

Según Sheinbaum, cuatro aviones con deportados arribaron al país en un solo día, cifras que, asegura, no representan un incremento significativo respecto a deportaciones previas.

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Sheinbaum subrayó que la aceptación de estos vuelos forma parte de acuerdos establecidos en administraciones anteriores, como la de Andrés Manuel López Obrador. Destacó la importancia de mantener una buena relación entre México y Estados Unidos, basada en el respeto a la soberanía nacional y la protección de los derechos de las y los mexicanos.

Además, la presidenta defendió el plan 'México te abraza', diseñado para apoyar a los deportados a través de empleo, programas sociales y centros de recepción en estados fronterizos. Sheinbaum también aseguró que en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) se les pregunta a los deportados si sus derechos humanos fueron vulnerados durante el proceso.

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Sheinbaum enfatizó la necesidad de diálogo y respeto mutuo entre las naciones de América Latina, especialmente en medio de la reciente crisis diplomática entre Estados Unidos y Colombia. La tensión surgió luego de que el presidente colombiano, Gustavo Petro, rechazara inicialmente la llegada de dos aviones con deportados desde EE.UU., lo que llevó a Trump a imponer aranceles del 25 % a los productos colombianos.

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Sin embargo, la mandataria celebró el acuerdo alcanzado entre ambos países, destacando que el diálogo debe prevalecer ante las tensiones. Asimismo, no confirmó si asistirá a la reunión de emergencia convocada por Xiomara Castro, presidenta pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).

Las políticas migratorias de Trump generan preocupación en México, dado que cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos son mexicanos. Además, las remesas enviadas por estos migrantes representaron en 2024 un récord estimado de USD 65 000 millones de dólares, equivalentes al 4 % del producto interno bruto (PIB) del país.