Evo Morales se autoproclama candidato a la presidencia de Bolivia a pesar de causas judiciales

Evo Morales anunció que participará en las elecciones presidenciales del próximo 17 de agosto en Bolivia, aunque no reveló con qué sigla política lo hará. Aseguró que lo mantiene en reserva “por seguridad y para evitar presiones y sabotajes del gobierno”. El exmandatario enfrenta una orden de captura emitida por la Fiscalía boliviana, que lo acusa de trata agravada de personas, y está legalmente inhabilitado para postularse.

Desde noviembre del año pasado, Morales permanece en la región cocalera del Trópico de Cochabamba. Su nueva agrupación, Evo Pueblo, no logró inscribirse ante el Tribunal Supremo Electoral, por lo que hasta ahora no cuenta con una plataforma legal para postularse. Sin embargo, insiste en que su candidatura es viable y afirma que “el miedo del gobierno” a su regreso demuestra su fuerza política.

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El panorama electoral boliviano se presenta como uno de los más divididos de los últimos años. El actual presidente, Luis Arce, enfrenta una ruptura con Morales y todavía no ha confirmado si será candidato. Mientras tanto, Andrónico Rodríguez, líder del Senado y visto como una figura intermedia entre ambos, encabeza los sondeos con un 18% de intención de voto, aunque tampoco ha oficializado su postulación.

Por el lado de la oposición, la falta de consenso también marca el proceso. El expresidente Jorge Tuto Quiroga, el empresario Samuel Doria Medina, el alcalde Manfred Reyes Villa y el pastor Chi Hyun Chung figuran como precandidatos con niveles de apoyo entre el 11% y el 17%, según encuestas recientes. Todos buscan posicionarse en una contienda que aún carece de una figura dominante.

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La carrera hacia las elecciones de agosto está marcada por tensiones, candidaturas sin confirmar y un electorado dividido. Mientras Morales insiste en su retorno a pesar de los obstáculos legales, el oficialismo se fragmenta y la oposición intenta capitalizar la incertidumbre. Todo apunta a una elección altamente competitiva y con desenlace impredecible.