Ecuador: La violencia despuntó en seis zonas en el primer mes del 2025

Jorge Luis y Anthony, de 64 y 26 años de edad, fueron acribillados junto a otra persona más en Durán, en Guayas. El crimen ocurrió a las cinco de la tarde del domingo 26 de enero del 2025.

La provincia se constituye como una de las más violentas del país al finalizar el primer mes del año, con 357 asesinatos hasta la madrugada de este viernes 31 de enero. Le sigue Manabí con 128 casos, en comparación con el 2024. (Ver cuadro)

La provincia que está en tercer puesto es El Oro con 60 muertes violentas, en comparación con las 11 que tuvo en enero del 2024. Esto pese a que desde diciembre, la fuerza pública intervino la zona tras el asesinato de 10 personas.

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Las cifras de la Policía Nacional posicionan a Santa Elena en cuarto lugar y a Sucumbíos en quinto. También a Tungurahua, con 11 casos, lo que representa un aumento del 450 %.

Por ejemplo el fin de semana del 25 de enero, un jefe provincial de la Comisión de Tránsito del Ecuador fue asesinado en la playa de Chipipe, en Salinas. Mientras que en Lago Agrio, un hombre de 31 años fue apuñalado 12 veces y su cuerpo dejado en una zanja.

Gran parte de los asesinatos han estado ligados a la disputa de territorio entre grupos criminales, según la Policía. Para la experta en crimen organizado, Michelle Maffei, los resultados de las acciones gubernamentales como la hipermilitarización o planes e contención, tienden a durar meses.

Maffei señaló que estas medidas han causado que nazcan más organizaciones delictivas y que las estructuras ya creadas se dividan. Además que generen más violencia como una especie de 'moneda de cambio'.

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La experta también puntualizó que esta situación ya ha sucedido en la guerra contra las drogas en México en el 2006. E incluso, en el proceso de paz del Plan Colombia en 2001.

Según Maffei, el 2025 podría ser un año más violento que 2023. Esto porque -dijo- no hay un buen control en las fronteras ni en el mar. A eso se sumaría, a decir de la experta, los pocos chequeos bancarios al ingresar altas sumas de dinero, lo que facilitaría el lavado de activos.

Efrén Guerrero, experto en seguridad, añadió que Ecuador ahora es un actor primario en las dinámicas del narcotráfico global. Además que hacen falta acciones más integrales, ya que se tiende a creer que "capturando al jefe de una banda se acaba el problema".

Así mismo, sobre el tema de las cifras que van en aumento, Guerrero comentó que el Gobierno debería "reconocer la magnitud del problema".

Tanto para Maffei como para Guerrero, el aumento de la violencia en ciertas zonas como Guayas, Manabí , Santa Elena, está ligado a la pugna entre los grupos delictivos por el acceso a los puertos y el aumento del precio de la droga en el mercado ilícito internacional.

Maffei indicó que en la Península por ejemplo, estarían laboratorios de cocaína. Además que esa zona al igual que Guayas, El Oro y Manta, son sitios estratégicos para sacar los bloques a Europa y Norteamérica.

En 31 días, se contabilizan al menos 731 asesinatos en Ecuador. Esto refleja un aumento de 229 muertes más versus el 2024. Si se comparan otros años como 2023, donde hubo 516 y 2022 con 315 crímenes, enero del 2025 es el mes más violento en los últimos tres años en la historia del país.

El promedio de asesinatos diarios a escala nacional sería de unos 25 casos. Por ejemplo el sábado 25 de enero, cuatro personas fueron asesinadas durante la mañana en Flor de Bastión, una zona del noroeste de Guayaquil donde el grupo criminal Los Tiguerones se dividió en dos facciones.

Así mismo, según las cifras de la Policía Nacional, solo entre el 13 y 19 de enero, hubo 27 matanzas en el país que dejaron 64 fallecidos. La experta en seguridad Katherine Herrera señaló que en el país persiste la fuerte presencia del crimen organizado.

Esto, argumentó, se debe a la impunidad y corrupción. Herrera puntualizó que falta aplicación de estrategia de políticas adecuadas para combatir el crimen organizado y desarticular las estructuras. A eso se sumaría la infiltración de las mafias en la fuerza pública, ya no solo Policía, sino también en las Fuerzas Armadas, que han estado desde enero del 2024 vinculadas al control carcelario tras la declaratoria de conflicto armado interno.

Herrera, Maffei y Guerrero coincidieron que se deben atacar las fuentes de financiamiento de los grupos delictivos, reforzar los mecanismos contra el lavado de activos y depurar los sistemas de justicia . Los expertos indicaron que hay que prevenir además de contener la violencia, proveer las necesidades básicas insatisfechas en algunas zonas y crear fuentes de empleo.

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