Elon Musk insta a cancelar Netflix y las acciones de la plataforma caen tras la polémica por una serie animada

El magnate tecnológico Elon Musk volvió a generar un escándalo con consecuencias financieras tras anunciar públicamente la cancelación de su suscripción a Netflix y llamar a sus millones de seguidores en X a hacer lo mismo. El lunes 29 de septiembre, Musk expresó su molestia por el contenido de la plataforma y, en un mensaje posterior, redobló su ataque pidiendo a sus seguidores que "cancelaran Netflix por la salud de sus hijos".

La crítica de Musk se centró en la serie animada Dead End: Paranormal Park. El CEO de Tesla argumentó que el programa, el cual está publicitado para niños a partir de siete años, está "impulsando la ideología pro-transgénero". Musk reaccionó a publicaciones que destacaban cómo el protagonista de la serie se declara abiertamente trans, y afirmó que este tipo de contenido no era apropiado para jóvenes espectadores.

La influencia de Musk se hizo sentir inmediatamente en el mercado. El miércoles por la mañana, las acciones de Netflix (NFLX) experimentaron una caída de más del 2% en las operaciones previas a la apertura del mercado. Este golpe reputacional demuestra el enorme poder que tiene el magnate, con más de 226 millones de seguidores, para movilizar la opinión pública y afectar la valoración de grandes corporaciones tecnológicas.

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La controversia generada por Musk coincidió con otros movimientos bursátiles que ya ponían a Netflix bajo presión. Analistas de Goldman Sachs habían recortado el precio objetivo de las acciones de la compañía el 30 de septiembre, aunque mantuvieron su recomendación de “Neutral”. Por otro lado, firmas como Bernstein reafirmaron su confianza en la plataforma, señalando que la acción había ganado casi un 70% en el último año a pesar de las polémicas.

Netflix ha enfrentado críticas conservadoras en los últimos años debido a sus decisiones de programación, aunque la compañía siempre ha mantenido que su objetivo es ofrecer contenido para una audiencia lo más amplia y diversa posible. No obstante, el desafío de Musk es significativo, ya que pocas veces la plataforma se ha enfrentado a una voz tan influyente con capacidad para generar una ola de cancelaciones viral y simultánea.

Esto provocó que ya cientos de personas hayan optado por cancelar sus suscripciones a la plataforma de streaming, lo que ha afectado significativamente a las acciones de la empresa.

Por ahora, la gran pregunta para los inversores y la compañía es si el llamado de Musk tendrá un efecto duradero en la base de suscriptores y en el precio de sus acciones, o si el episodio se desinflará con el tiempo. Lo cierto es que, en el sensible mercado del streaming, una sola publicación de una figura pública con tanto alcance puede ser suficiente para encender un intenso debate sobre la dirección y el futuro del contenido.

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Dead End: Paranormal Park es una serie de televisión animada de comedia y terror sobrenatural, basada en la serie de novelas gráficas DeadEndia de Hamish Steele, que se emite en Netflix y está dirigida a un público juvenil e infantil, con una etiqueta de +7. La serie sigue las aventuras de Barney Guttman y sus amigos, quienes trabajan en un parque de diversiones embrujado y deben enfrentarse a demonios y otros seres paranormales.

El punto central de la polémica que la llevó a ser criticada por Elon Musk y otros usuarios conservadores fue la representación abierta de temas de identidad de género, ya que su protagonista principal, Barney Guttman, es un adolescente transgénero.

La controversia escaló luego de que Elon Musk pidiera a sus seguidores en X que cancelaran sus suscripciones a Netflix, argumentando que la serie estaba "impulsando la ideología pro-transgénero" hacia niños a partir de siete años. Para Musk y sus críticos, la inclusión de un personaje principal que se presenta como trans en un contenido para público infantil constituye una forma inapropiada de promoción ideológica y una posible adoctrinación.

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