Ronaldinho Gaúcho tendrá su revancha ante el hombre que lo descartó en el Barça

"Decían que estaba acabado, que hablen ahora" fue la frase que Ronaldinho repitió tras ganar la Copa Libertadores con el Atlético Mineiro. Después de remontar el marcador conseguido por Olimpia en Asunción, el jugador brasileño se convierte en el primer futbolista en toda la historia del fútbol en ganar los títulos más importantes a nivel de clubes, además de un Balón de Oro, es campeón del mundo, de la confederaciones y de América con su selección. 

Si el Bayern Múnich y Atlético Mineiro llegan a la final de este torneo, Ronaldinho tendrá la oportunidad de medirse cara a cara con Josep Guardiola y, en cierta medida, puede tener su revancha del entrenador que le obligó a abandonar el Barça en el año 2008 y empezar a firmar el declive que el futbolista ya llevaba arrastrando en sus última temporada a las órdenes de Frank Rijkaard después de haber sido, de largo, el mejor jugador del mundo en 2006.

Cuando abandonó el Milan y regresó al Flamengo, Dinho sólo dejaba muestras de su enorme talento con cuentagotas, pero el cambio de aires y de mentalidad cuando firmó pocos meses después por el Atlético Mineiro, y la ilusión por volver a ser internacional con Brasil y jugar el año que viene el Mundial en su país han hecho que emerja una gran versión de un futbolista que aunque ya cuenta con 33 años, parece negarse a arrojar la toalla.

Incluso en los últimos días se ha hablado de una hipotética vuelta al fútbol europeo en el equipo turco del Besiktas. Posibilidad que en caso de concretarse, le impediría volver a verse las caras con Pep Guardiola e intentar robarle un título a su Bayern.