Un torbellino destruyó techos y otras instalaciones de una fundación de rescate animal

Un fuerte torbellino afectó las instalaciones de la Fundación Lucky Bienestar Animal, la tarde del 21 de julio. Los techos y otras estructuras, especialmente de perreras, fueron arrastradas por el remolino de viento que se registró en Píntag, al oriente de Quito.

En imágenes compartidas por la Fundación se observa cómo el remolino llega a los terrenos que albergan cerca de 900 animales, entre perros, gatos, caballos, vacas y cerdos. La fuerza del viento inquietó a los animales y a sus cuidadores.

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"Cuidado los perros", grita uno de los colaboradores, mientras la ráfaga levantaba los techos de zinc.

En los últimos días, Quito ha registrado fuertes vientos que, según Madelyn Enríquez, analista de pronósticos del Instituto Nacional de Metereología e Hidrología (Inamhi), se presentan debido a que el cantón está entrando a la época seca.

"Una de las condiciones de la época seca son las ráfagas de viento, mayor presencia de sol, radiación UV. La mayor presencia de viento provocará que se seque la vegetación y empezaremos a ver los primeros incendios forestales", dijo la experta.

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La principal área afectada servía como refugio para perros. Algunos de ellos sufrieron heridas por los objetos que volaban con fuerza y otros se lastimaron a sí mismos, en su intento de escapar.

"El lugar donde muchos de nuestros pequeños dormían ya no existe... y me duele el alma verlos asustados, buscando su rincón seguro entre escombros", señaló la fundación en redes sociales. Agregaron que ante la emergencia, este 21 de julio se debió priorizar los recursos para reparaciones, en lugar de alimentos.

Lucky Bienestar Animal es un centro que funciona por fondos privados y donaciones, por lo que no cuentan con un fondo de emergencia para desastres naturales. "Con 900 animales, siempre vamos con lo justo: comida, medicinas, sueros, deudas que se acumulan... sobrevivimos día a día", agregó el comunicado.

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Al momento se han descartado afectaciones graves en animales o humanos. Sin embargo, gran parte de las perreras resultó destruida. La Fundación pide el apoyo ciudadano para recuperar las áreas afectadas. Puede contactarse con ellos al teléfono 098 716 9199.

"Si puedes apoyar con mano de obra, con un granito de arena, con materiales o con donaciones, (...) cada clavo, cada zinc, cada moneda, será una promesa de esperanza para ellos".