-
ECUADOR.- El padre César Piechestein durante su entrevista en Contacto Directo. Foto: Ecuavisa
24 de diciembre de 2014. El vocero de la Arquidiócesis de Guayaquil habló del nacimiento de Jesús.
Hoy el mundo católico celebrará la Nochebuena y mañana Navidad. Haciendo un paréntisis en todo nuestro ajetreo para recordar lo que realmente se está celebrando en esta Navidad, el padre César Piechestein, vocero de la Arquidiócesis de Guayaquil, realiza una reflexión al respecto.
“A pesar de que Dios decidió que para el nacimiento de su hijo solo interviniese la virgen María, y quiso también que su hijo tenga un padre adoptivo. Esta es una lección importantísima porque vemos que Dios ha querido nacer en una familia, con un padre con una madre, que le educaron, que le protegieron, por eso Navidad no es solo una fiesta por el nacimiento del niño Jesús sino una fiesta que reviste una importancia familiar grandísima”, expresó durante su entrevista en el programa Contacto Directo.
En el Sínodo de la Familia, que tuvo lugar en octubre, se trató precisamente eso, el papa Francisco sostuvo que "la familia está recontra baqueteada", es decir, gastada, maltratada. Se habló, también, de las personas homosexuales en relaciones con sus familias, y de los divorciados vueltos a casar. ¿Cómo manejar realidades que se dan en muchas familias desde los principios de integración de la Iglesia?
“Nosotros como Iglesia tenemos que predicar a un Dios amoroso, misericordioso, que se hizo hombre para comprender todas nuestras realidades. San Pablo dice que Jesús se hizo en todo igual a nosotros menos en el pecado. Pero esa misericordia va unida también a la justicia de Dios, por eso hay que defender a la familia natural, la unión del hombre y la mujer que es bendecida con la fecundidad, por eso cada niño tiene ese derecho de poder contar con un padre y una madre”, manifestó el sacerdote.
Asimismo, agregó que si bien no siempre una familia se da bajo estas circunstancias, que serían las idóneas, siempre hay que dar este valor importantísimo a la familia.
El pontífice también dijo que debemos celebrar una Navidad verdaderamente cristiana. Al respecto, el padre señaló: siempre hay una tentación de quedarnos en las cosas materiales, pero creo que también es natural que para un tiempo tan bonito de compartir en familia uno sienta ese deseo de comprar algo a su familia y esa es una muestra de cariño. Es importante compartir la mesa con la familia, lo que no hay que olvidar es que lo que más cuenta en este sentido es la vida familiar, el cariño, el afecto, más que dar cosas es el tiempo compartido en familia”.
Vea la entrevista completa en el video adjunto a la nota
Recomendadas