Alarma en la parroquia El Laurel en Daule por el aumento de enfermedades por inundaciones

En el sector uno de la parroquia El Laurel, en el cantón Daule (Guayas), una niña camina entre el agua estancada para llegar a la casa de Martha Díaz. La zona permanece inundada desde hace diez días debido al desbordamiento del río Pula, situación que ahora también pone en riesgo la salud de sus habitantes.

La acumulación de basura y desechos arrastrados por la corriente ha generado focos de infección. Los moradores reportan un aumento de enfermedades. “Aquí hay mucho mosquito y nos da comezón en los pies”, relató una ciudadana, mientras que los niños sufren de fiebre y otras afecciones.

El agua estancada dentro de las casas provoca irritaciones en la piel. Humberto Seme, quien además padece diabetes, mostró las lesiones en sus pies. “Necesito medicina, mis hijas y mi esposa también están enfermas”, reclamó.

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En el centro de salud de El Laurel, donde apenas hay seis médicos, los diagnósticos más comunes son infecciones respiratorias y hongos en la piel. Sin embargo, el personal y los medicamentos son insuficientes para atender la creciente demanda.

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El presidente del GAD parroquial, Manuel Avilés, indicó que el 85 % de El Laurel está inundado y lanzó un llamado de auxilio al gobierno nacional. “No alcanzan los doctores, ni la medicina. Hay muchos niños con desnutrición, problemas en la piel y las familias han perdido su trabajo agrícola”, señaló.

La situación en los recintos rurales es crítica. El estancamiento del agua, la proliferación de lama y lechuguines aumentan los riesgos de enfermedades, por lo que los habitantes reiteran su pedido urgente de atención médica y ayuda humanitaria.