-
Misión de ONU que investiga 30-S termina visita
La misión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que investiga el alzamiento policial del 30 de septiembre de 2010 en Ecuador, que el Gobierno interpretó como un intento de golpe de Estado, terminará hoy, jueves, su visita al país tras reuniones con diversos sectores.
La misión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que investiga el alzamiento policial del 30 de septiembre de 2010 en Ecuador, que el Gobierno interpretó como un intento de golpe de Estado, terminará hoy, jueves, su visita al país tras reuniones con diversos sectores.
Una fuente de la ONU señaló que los delegados viajarán el viernes a primera hora a Nueva York.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, recibió el miércoles en el palacio presidencial de Carondelet al argentino Oscar Fernández Taranco y al uruguayo Elio Tamburi, delegados del secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, para investigar el caso, por pedido del propio Gobierno ecuatoriano.
La ministra coordinadora de Patrimonio, María Fernanda Espinosa, quien también se reunió con los delegados de la ONU, indicó hoy a periodistas que posiblemente al final de la visita la organización emita un comunicado.
Apuntó que la misión entregará su informe al secretario general de la ONU, quien en función del documento responderá formalmente el pedido del jefe de Estado.
Destacó la agilidad del secretario general para designar a la misión que, según la ministra, ha trabajado "intensamente" en los últimos tres días en Ecuador.
"Ellos han tenido oportunidad de dialogar con la mayor cantidad de actores políticos, desde el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas hasta las organizaciones no gubernamentales, los partidos de oposición. En función de eso van a conocer los hechos", dijo.
Los delegados mencionaron que tienen "cantidades de información casi físicamente inmanejable porque a todo sitio donde han ido les han entregado enorme cantidad de información gráfica, escrita, vídeos, etcétera", comentó Espinosa.
El 30 de septiembre de 2010 unos 1.200 policías y militares, según cifras oficiales, participaron en una protesta por motivos salariales que derivó en un alzamiento de proporciones.
Ese día, Correa, que acudió a hablar con los agentes sobre sus inquietudes salariales, fue agredido y quedó atrapado en un hospital de la Policía, del que sólo pudo salir en la noche tras una operación de militares y policías leales, en medio de un intenso tiroteo.
En los enfrentamientos en Quito entre los amotinados y fuerzas leales al Gobierno murieron cinco personas.
En octubre pasado, Correa dijo que pediría a la ONU y a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que nombraran comisiones para investigar la sublevación "con total independencia".
No obstante, la Unasur indicó en noviembre que los presidentes de los países miembros ya declararon que consideraban que ese día hubo un intento de golpe de Estado y la entidad se abstuvo de abrir la investigación solicitada por Ecuador.
Recomendadas