Ecuatoriana en Estados Unidos estranguló a sus tres hijos y luego se ahorcó, confirma autopsia: "era una madre amorosa", afirman los vecinos

La autopsia realizada a una inmigrante ecuatoriana y a sus tres hijos, hallados muertos en su hogar de Connecticut (Estados Unidos), confirmó que la madre estranguló a los niños y que luego de ahorcó, tal y como creía la Policía de la localidad de Danbury.

La Oficina del Médico Forense de Connecticut dio a conocer este viernes los resultados de las autopsias a Sonia Loja, de 36 años, y sus hijos Jonael Panjón, de 5 años, Joselyn, de 10, y Junior de 12, según medios de prensa.

La Policía había indicado el jueves que la investigación inicial encontró que Loja "estranguló a sus tres hijos" antes de quitarse la vida, pero esperaba por la autopsia para confirmarlo.

Loja había emigrado hace 15 años a Estados Unidos desde su natal Ecuador y aún se desconoce qué le llevó a estrangular a sus hijos y quitarse la vida, una tragedia que ha consternado a amigos y vecinos del tranquilo vecindario en que vivía.

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Pedro Panjón, esposo de Sonia y padre de los niños, quien trabaja en jardinería, encontró los cuerpos cuando decidió ir a su hogar porque su esposa no contestaba sus llamadas.

Tras unos minutos en su casa, salió, llamó a la Policía y luego se desmayó.

Según ha trascendido, Loja cuidaba niños de otras familias en una guardería sin licencia que tenía en su domicilio, y había recibido dos citaciones de la agencia del estado encargada de ese tema.

Sus vecinos la describieron como una madre que siempre estaba atenta a sus niños y era amorosa con los que cuidaba. Colocaron velas, flores, globos blancos y un oso de peluche en los escalones de la entrada de la casa.

"No puedo creer que haya hecho esto, no puedo creer lo que pasó", dijo al New York Post Sonia Sucuzhanay. "Me sentía tranquila dejando a mis hijos con Sonia", aseguró.

De acuerdo con Elvis Espinal, el miércoles Loja dijo a uno de los padres que acudió a dejar a su hijo que ese día no podría cuidarlo. La emigrante se comunicó con los padres de los diez niños que atendía para informarles lo mismo, agrega el diario.