En este sector de Imbabura, un deslizamiento de tierra provocado por una falla geológica destruyó 12 hectáreas donde habían casas y cultivos.
La parte alta de la comunidad San José de Aloburo del cantón Pimampiro, parece el epicentro de un terremoto.
En este sector de Imbabura, un deslizamiento de tierra provocado por una falla geológica destruyó 12 hectáreas donde habían casas y cultivos.
"Podemos decir que hay dos tipos de pérdidas, primero las personas que se quedaron sin sus viviendas, que ya son 26 familias, y las otras que no tenían su casa aquí, pero que tenían su actividad económica. Las pérdidas para mí, en un análisis ligero, superan el medio millón de dólares", apuntó el alcalde de Pimampiro, Armando Chávez.
El agricultor Ángel Benítez fue uno de los afectados, con impotencia y resignación, señaló lo que quedó de sus tres invernaderos, contó que estaba a punto de cosechar mil cajas de tomate riñón y 700 saco de pepinillo.
La familia pupiales en cambio, tuvo que desmantelar su casa nueva para rescatar algunos materiales que no se destruyeron con el deslizamiento, ellos no pudieron estrenar su hogar.
Los lugareños denominaron a este fenómeno como la falla de San José, pues cada día.
Los habitantes de San José de Aloburo todavía siente temor, dicen que aquí la tierra no deja de hundirse, y el movimiento de los escombros, es evidencia de ello.
Por esa razón, el COE Cantonal, ordenó la evacuación de todas las viviendas construidas en un radio de 70 hectáreas a la redonda de donde ocurrió el deslizamiento de tierra inicial. 10 de esas familias fueron llevadas a una escuela de la localidad, convertida en casa de acogida.
Según el alcalde, el municipio de Pimanpiro y el Ministerio de vivienda ya trabajan en un plan de reubicación para los damnificados.
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