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Sarah Mullally hace historia como la primera mujer arzobispa de Canterbury
Un ex jefa de enfermería de Inglaterra asume el liderazgo de la Iglesia anglicana.
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Arzobispa Sarah Mullaly ( )
La Iglesia de Inglaterra marcó un hito este viernes al nombrar a Sarah Mullally, de 63 años, como la primera mujer en ocupar el arzobispado de Canterbury, el cargo de mayor rango dentro de la Iglesia anglicana y que la convierte en su líder espiritual a nivel mundial.
El anuncio fue realizado desde Downing Street, tras meses de deliberaciones de la Comisión de Nominaciones de la Corona, casi un año después de la renuncia de Justin Welby. La ceremonia de consagración tendrá lugar en enero de 2026 en la Catedral de Canterbury, con la presencia de miembros de la familia real.
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Mullally, madre de dos hijos y actual obispa de Londres, fue también jefa de enfermería de Inglaterra y distinguida por sus aportes al sistema de salud antes de dedicarse al ministerio cristiano. Convertida al cristianismo a los 16 años, aseguró que asume esta responsabilidad con paz y confianza en Dios, destacando que su vocación siempre ha sido escuchar profundamente y unir a las personas para encontrar esperanza y sanación.
El primer ministro Keir Starmer celebró el nombramiento como un avance histórico para la igualdad de género. Sin embargo, sectores conservadores de la Iglesia ya anticiparon su rechazo, mientras colectivos como WATCH lo califican como un paso decisivo hacia la equidad.
El nuevo reto de Mullally no será menor ya que deberá abordar temas sensibles como:
Con su designación, la Iglesia de Inglaterra culmina un proceso iniciado en 2014, cuando aprobó la ordenación de mujeres obispos, y que ahora se materializa en el liderazgo más alto de su jerarquía.
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