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Una tropa con agentes federales irrumpió en un parque de un barrio con población migrante en Los Ángeles
El operativo con vehículos militares duró apenas una hora y desató una fuerte reacción política. La alcaldesa lo calificó como un acto de intimidación del Gobierno de Trump
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Fotografía referencial.( )
Una escena impactante paralizó por unos minutos la tranquilidad de MacArthur Park, en el corazón de Los Ángeles, ya que más de 90 soldados de la Guardia Nacional de California y decenas de agentes federales, acompañados por vehículos militares, irrumpieron en este espacio público del barrio inmigrante la mañana del lunes. Aunque el operativo duró solo una hora y no se reportaron detenciones, la imagen de tropas armadas patrullando un parque urbano provocó alarma y rechazo.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, estuvo presente en el lugar y declaró que la acción representa una forma de intimidación por parte del Gobierno de Donald Trump, quien ha intensificado sus operativos migratorios con apoyo militar, y se espera que Bass brinde declaraciones más detalladas en una rueda de prensa.
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Un despliegue sin precedentes
Según fuentes del Departamento de Defensa citadas por Associated Press, el operativo incluyó:
Funcionarios aseguraron que la función de las tropas era únicamente proteger a los agentes de inmigración, en caso de una reacción hostil, y que no se trató de una operación militar formal, pero sin embargo, reconocieron que la magnitud del despliegue podía generar esa impresión.
El operativo ocurrió sin previo aviso y fue grabado por activistas que habían advertido a los residentes que se alejaran del parque, además la zona es conocida por ser un punto de encuentro para comunidades mexicanas, centroamericanas y de otras nacionalidades, y por su intenso movimiento comercial informal, con puestos ambulantes y actividades culturales.
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El presidente ha reafirmado su promesa de deportar a millones de inmigrantes indocumentados, y no ha dudado en recurrir a recursos militares para respaldar sus redadas. La acción en MacArthur Park, uno de los lugares más simbólicos para la comunidad migrante en la ciudad, ha encendido las alarmas entre defensores de derechos civiles.
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