Desde Sixto Durán Ballén hasta Daniel Noboa: cinco Presidentes impulsaron preguntas polémicas en consultas populares

En Ecuador, no es nuevo que el Presidente de la República convoque a consultas populares o referendos para reafirmar su poder y someter a votación temas sensibles. Desde el retorno a la democracia, esto ha ocurrido en cinco ocasiones, repitiéndose una estrategia común: combinar preguntas de escasa trascendencia con otras de mayor peso político.

El presidente Daniel Noboa recurre a esta herramienta por segunda vez desde que asumió el poder. En esta ocasión, ha surgido la intención de permitir el control político sobre los jueces de la Corte Constitucional, lo que ha generado preocupación por considerarse una posible amenaza a la independencia judicial.

¿Qué han propuesto los Presidentes?

Sixto Durán Ballén fue presidente de Ecuador de 1 992 a 1 996 y durante su mandato llamó a las urnas en dos ocasiones, para consultas populares.

En la primera, de 1994, obtuvo el sí en seis de siete preguntas, la única que fue negada estuvo relacionada con permitir a los diputados administrar fondos del presupuesto público.

Durán Ballén también consultó si los ciudadanos no afiliados a partidos políticos pueden participar como candidatos de elección popular; así como si debería permitirse la reelección para cargos en cualquier función del Estado.

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Fabián Alarcón asumió el poder de 1997 a 1998, como interino. La consulta popular fue convocada con el objetivo de legitimar su mandato, luego de la destitución de Abdalá Bucaram y el paso fugaz de Rosalía Arteaga.

En el referendo, el Presidente aprovechó para preguntar a los ciudadanos si están de acuerdo en convocar a una Asamblea para reformar la Constitución Política.

Rafael Correa llamó a cuatro consultas populares durante su administración. Dos, relacionadas con la Constitución, primero para preguntar si los ciudadanos querían llamar a una Asamblea Constituyente y la segunda para aprobar el contenido.

El plebiscito que marcó su Gobierno fue el de 2011. Incluyó propuestas polémicas, por ejemplo, la prohibición de que los accionistas de instituciones financieras o de empresas de comunicación tengan participación en otros ámbitos.

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También preguntó si los ciudadanos están de acuerdo con crear un Consejo de la Judicatura que reestructure la Función Judicial. Además, con que la Asamblea Nacional realice una Ley de Comunicación y se cree un Consejo de Regulación.

Dentro de esa consulta popular, Correa incluyó temas intrascendentes como la prohibición de casinos, espectáculos con finalidad de muerte de un animal, entre otros.

En 2017, Correa convocó nuevamente a las urnas y en esa ocasión fue para preguntar la prohibición de tener bienes o capitales, de cualquier naturaleza, dentro de paraísos fiscales para ejercer cargos de elección popular. Ese planteamiento tuvo el objetivo de afectar la candidatura de Guillermo Lasso.

Lenín Moreno rompió con la Revolución Ciudadana a pocos meses de haber asumido la Presidencia y al siguiente año se convirtió en la figura de oposición contra Correa. Aprovechando esa coyuntura, llamó a votaciones por referéndum y consulta popular.

Incluyó temas como la inhabilidad de personas condenadas por corrupción en la vida política, la reelección por una sola vez, la reestructuración del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, así como la posesión de uno transitorio.

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El resultado del primer referéndum y consulta popular de Noboa fue favorable en nueve de las 11 preguntas, todas relacionadas con la seguridad: competencia de Fuerzas Armadas, extradición, incremento de penas, uso de armas incautadas, entre otros.