28 may 2025 , 11:17

Los 5 pecados de Barcelona SC

Entre errores tácticos, decisiones mal tomadas y un plantel sin respuestas, Barcelona decepcionó en la Copa Libertadores y los hinchas piden la salida de Segundo Castillo.

   

Barcelona SC se despidió de la Copa Libertadores con un papel decepcionante. Último en su grupo, con apenas 4 puntos en 6 partidos, el equipo torero no solo quedó eliminado, sino que perdió la jerarquía copera que tanto le costó construir en 100 años de historia. Su campaña fue una colección de errores tácticos, decisiones mal ejecutadas y rendimientos individuales por debajo del nivel esperado.

UN EQUIPO SIN IDENTIDAD

Desde el inicio del torneo, Segundo Alejandro Castillo nunca logró transmitir una idea clara de juego. Y lo más grave: tampoco supo reaccionar cuando las cosas no salían. No hubo plan A ni plan B. El equipo fue, partido tras partido, un conjunto tambaleante en defensa, inconexo en el medio campo y con una delantera completamente aislada. La dependencia de alguna jugada individual fue evidente. En lo colectivo, Barcelona nunca compitió de verdad.

UN GRUPO SUPERABLE... EN EL PAPEL

Compartir grupo con River Plate, Independiente del Valle y Universitario parecía un desafío, sí, pero no una sentencia. Se pensaba que los toreros podían pelear el pase a octavos. Sin embargo, River lideró con 12 puntos y Universitario clasificó segundo, con 8 puntos, seis de los cuales los obtuvo justamente ante Barcelona, tanto en Guayaquil como en Lima. ¿Cómo aspirar a avanzar si no puedes hacerte fuerte ni de local?

DE UN BUEN ARRANQUE AL DESASTRE

Tras un debut prometedor con victoria ante IDV, el equipo fue a Buenos Aires a enfrentar a River y renunció a atacar, sin un solo remate al arco. Un empate con sabor a nada. Luego, vino el desastre: derrotas consecutivas ante Universitario (en casa), River (otra vez en casa), Universitario (en Lima) e IDV (en Sangolquí). Lo que comenzó con ilusión, terminó con una caída libre sin frenos ni respuestas ni plan de juego.

MALAS DECISIONES DEL DT

​​Castillo apostó durante demasiado tiempo por jugadores que no le respondieron, como Janner Corozo, y se equivocó constantemente en los cambios. En más de una ocasión, terminó sacando a los pocos que estaban rindiendo, y con ello el equipo no solo que no mejoraba, sino que se desmoronaba. La lectura táctica fue deficiente, y eso en un torneo como la Libertadores, se paga caro.

ALARMA EN LIGAPRO

No solo quedó fuera de la Libertadores. En el torneo local, Barcelona acaba de perder la punta y ha encendido las alarmas. El combustible emocional y futbolístico parece agotado. El equipo ha perdido jerarquía, crédito y la paciencia de su hinchada, que pide un cambio urgente en la dirección técnica.

La dirigencia no puede quedarse de brazos cruzados esperando otro tropiezo. El año no está perdido, pero sí en riesgo, y estamos apenas en mayo. Aún hay tiempo para corregir el rumbo, pero la inacción también puede ser un pecado.

Noticias
Recomendadas