Dos jóvenes de EE. UU son acusados de planear invasión a isla haitiana para violar a mujeres y niños
Dos jóvenes residentes en Texas fueron acusados formalmente de conspirar para invadir una isla frente a las costas de Haití con el objetivo de asesinar a todos los hombres que habitan allí y convertir a mujeres y niños en esclavos sexuales, según informó la Fiscalía de Estados Unidos.
Los señalados son Gavin Rivers Weisenburg, de 21 años y originario de Allen, y Tanner Christopher Thomas, de 20 y residente de Argyle, ambos fueron imputados por un gran jurado federal en el Distrito Este de Texas.
Enfrentan cargos por conspiración para asesinar, mutilar o secuestrar en un país extranjero, así como por producción de pornografía infantil, de acuerdo con comunicados oficiales citados por CBS Texas.
Entre agosto de 2024 y julio de 2025, Weisenburg y Thomas habrían diseñado un plan para organizar una fuerza mercenaria ilegal con la que pretendían invadir la Isla de Gonave, ubicada al oeste de Puerto Príncipe y con una población cercana a las 87 000 personas.
De acuerdo con los documentos judiciales, los acusados tenían la intención de comprar un velero, adquirir armas y municiones, y reclutar personas sin hogar en Washington D.C. para convertirlos en su ejército durante un golpe armado.
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Según CBS, el objetivo declarado era ejecutar su “fantasía de violación” y convertir a mujeres y menores en esclavos sexuales. Las autoridades indicaron que ambos desarrollaron planes operativos y logísticos, estudiaron el idioma criollo haitiano e intentaron adquirir habilidades para su misión.
Thomas se enlistó en la Fuerza Aérea de Estados Unidos para aprender destrezas militares, mientras que Weisenburg viajó a Tailandia en febrero de este año para tomar cursos de navegación, aunque no pudo completarlos por razones económicas, informó la cadena Fox4.
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Posibles condenas y proceso judicial en curso
Si son declarados culpables, ambos jóvenes podrían enfrentar hasta cadena perpetua por el cargo de conspiración para cometer asesinato en el extranjero. El cargo federal por producción de pornografía infantil contempla penas de 15 a 30 años de prisión.
La investigación continúa bajo la coordinación del FBI, la Oficina de Investigaciones Especiales de la Fuerza Aérea y la Policía de Celina, Texas.