El regreso de la serie animada One-Punch Man, envuelto en ovaciones y críticas
El largo periodo de espera ha terminado, la tercera temporada de One-Punch Man finalmente llegó a las plataformas de streaming, seis años después de su última emisión. La serie, que narra las aventuras de Saitama, el superhéroe capaz de vencer a cualquier enemigo con un solo golpe, vuelve a generar emoción, pero también una profunda controversia entre sus millones de seguidores. La polémica se centra, nuevamente, en la calidad de la animación.
El debate se remonta a la segunda temporada, cuando el estudio de animación cambió de Madhouse a J.C. Staff. Este cambio fue recibido con críticas por el fandom, que consideró el trabajo visual como muy inferior a la fluidez y espectacularidad de la entrega original. Ahora, con el estreno de la tercera temporada, la misma productora repite, y aunque algunos perciben una mejoría, otros temores se han cristalizado: One-Punch Man "ya no se ve como solía hacerlo".
El primer episodio de la nueva temporada retoma la trama justo donde se quedó, con los héroes sanando las heridas tras su última batalla y el temible "Monstruo Humano" Garou adentrándose por completo en la Asociación de Monstruos. Este es el inicio del aclamado arco de la Asociación de Monstruos, una narrativa rica y caótica que requiere de una animación impecable para hacer justicia a las batallas épicas que se avecinan.
Pese a la tensión narrativa, los primeros comentarios de los fans inundaron las redes sociales con quejas sobre la animación, usando términos como "pase de diapositivas" o criticando el uso excesivo de tomas estáticas. Esta frustración se debe a la falta de detalle y la escasa fluidez en las secuencias de acción, en contraste con la espectacularidad que hizo famosa a la primera temporada. El temor generalizado es que la calidad decaiga justo en las peleas más importantes del arco.
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Ante la avalancha de críticas, el director de la temporada 3, Shinpei Nagai, se vio obligado a romper el silencio. De manera casi inaudita en la industria del anime, el director admitió implícitamente que, debido a limitaciones de presupuesto y cronograma, la temporada "nunca podría superar a la temporada 1" en términos de animación pura. Esta declaración, aunque honesta, sirvió como confirmación de que las limitaciones técnicas son reales.
Sin embargo, hay elementos que apuntan a un potencial de mejoría. Muchos seguidores han notado un trazo más grueso, un diseño de personajes más "resultón" y una mejoría en la iluminación y el trabajo de fondos en comparación con la segunda temporada. Si bien el arranque ha sido tranquilo y se siente más como un epílogo que como una explosión de acción, la serie ha conseguido mantener el humor característico y la fuerza de sus personajes principales.
La premisa cómica de Saitama, un héroe que está aburrido por ser demasiado poderoso, sigue siendo la principal base de la franquicia, y su desarrollo narrativo mantiene el interés del público pese a las deficiencias visuales.
La prueba de fuego para J.C. Staff vendrá con las grandes secuencias de combate contra la Asociación de Monstruos. El tiempo dirá si el estudio consigue revertir la percepción inicial y si la larga espera de seis años habrá merecido la pena, logrando que esta nueva entrega se recuerde por su épica historia y no únicamente por la controversia de su calidad visual.
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