Esto es nagging, la práctica que desgasta las relaciones de pareja

En cualquier relación de pareja, la comunicación efectiva es clave para mantener la armonía y el amor. Sin embargo, a veces surge un patrón comunicativo perjudicial conocido como "nagging", que puede convertirse en una trampa para la relación. Nagging proviene del verbo en inglés "nagg" que significa regañar y "nagging" se traduce como persistente, este término se refiere a los reclamos repetitivos que un miembro de la pareja hace hacia el otro, generando resentimiento y tensión.

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El Dr. Walter Ghedin, reconocido psiquiatra y sexólogo, advierte sobre los peligros del "nagging" y cómo este puede llevar a una dinámica desequilibrada en la pareja.

Los reclamos son parte de la vida en pareja, pero cuando se vuelven recurrentes y excesivos, pueden generar un ambiente tóxico. El Dr. Ghedin señala que estos reclamos no solo ponen al otro en una posición defensiva, sino que también pueden:

• Erosionar la confianza: cuando una persona siente que sus acciones son constantemente cuestionadas, es difícil mantener un nivel de confianza sólido en la relación.
• Dañar la comunicación: los reclamos constantes crean una barrera comunicativa, ya que las parejas se centran en culparse mutuamente en lugar de buscar soluciones conjuntas.
• Generar resentimiento: el resentimiento se acumula con el tiempo cuando una persona siente que sus necesidades no están siendo atendidas o que es constantemente criticada.

Pero, ¿por qué algunas personas tienden a recurrir al "nagging" con más frecuencia que otras? El Dr. Ghedin sugiere que la ansiedad de separación, la necesidad de control y las experiencias pasadas pueden influir en este comportamiento.

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¿Cómo romper el ciclo del "nagging"?

Es importante reconocer que el "nagging" es un patrón de comportamiento aprendido y que puede ser modificado. El Dr. Ghedin ofrece algunas sugerencias para romper este ciclo:

• Comunicación abierta y honesta: hablar sobre los sentimientos y las necesidades de manera respetuosa es fundamental para resolver los conflictos.
• Empatía: tratar de ponerse en el lugar del otro puede ayudar a comprender sus perspectivas y a reducir la tensión.
• Establecer límites: es importante establecer límites claros en la relación y respetar los espacios personales de cada uno.
• Buscar ayuda profesional: si el "nagging" se ha convertido en un problema crónico, la terapia de pareja puede ser una herramienta valiosa para aprender nuevas formas de comunicarse y resolver conflictos.

El "nagging" puede tener consecuencias devastadoras para una relación. Sin embargo, al reconocer este patrón de comportamiento y tomar medidas para cambiarlo, es posible construir relaciones más saludables y satisfactorias.