La Manga del Cura se prepara para definir a quién le pertenece

Por: María del Cisne Guamán 

Ecuavisa.com 

El sector La Manga del Cura se prepara para la consulta popular que definirá su pertenencia a una de dos provincias: Guayas o Manabí. En ese territorio abundan banderas, carteles y maquinaria. Algunos consideran que ya se vive una campaña anticipada.

Si algo hay en estos días en La Manga del Cura son banderas, las mismas que tienen los colores de Manabí y Guayas adornando los portales de las casas.  

Vicente Fernández y Milagro Vera son dos amigos del recinto Santa Teresa que tienen posturas diferentes. Uno quiere pertenecer a Guayas y el otro a Manabí, pero no dejan que eso los enfrente.

"Somos hermanos, si somos de acá pertenecemos a la misma familia y es feo estar así con este problema tan visible", dijo Vicente Fernández.

"No importa de donde vengan, lo que nos importa es que hagan las obras porque tenemos como 50 años abandonados, sin obras y solo cuando están en política es que vienen a prometer", afirmó Milagro Vera. 

Podrá faltar la fecha para definir cuando es la consulta popular que pondrá fin a este debate, pero algunos dicen que la campaña ya empezó. Postes recién pintados y una repentina aparición de decenas de carteles parecen confirmarlo.

En estos días es fácil encontrar maquinaria pública trabajando en una u otra calle de La Manga, algo que no pasa desapercibido en un sector donde la mayoría de las vías están en mal estado, pero las interpretaciones de esto también son tan variadas como el pensamiento de sus habitantes.

"Aquí sabemos que Manabí está haciendo muchas obras, mientras que el Guayas muy pocas", comentó Genaro Ibarra, habitante de La Manga del Cura.

"Cuantos años hemos pasado abandonados y ahora dicen que le pertenecemos a Manabí y yo pregunto por qué no nos han hecho obras", dijo Rosa Ganchozo, habitante de La Manga del Cura. 

El debate solo se reaviva entre los habitantes de La Manga del Cura cuando alguien les pregunta sobre el tema. Es un día normal y hasta que llegue la consulta, la gente se concentra en su vida cotidiana. Siguen trabajando, dedicados a la agricultura y al comercio, como diciendo en silencio que la política o la pertenencia a una provincia, no les va a dar de comer.