Médicos, atentos a decisión sobre mala práctica profesional

Los médicos de los hospitales públicos del país se encuentran en compás de espera; su advertencia de renuncia masiva se mantiene si se penaliza la mala práctica profesional en el nuevo Código Integral Penal (COIP), aunque a diferencia del viernes, hoy alientan la posibilidad de un veto presidencial a ese artículo.

Luego de las declaraciones del presidente de la República, Rafael Correa, sobre esta posibilidad, Alberto Narváez, presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, indicó que “el mandatario debe hacer lo mismo que hizo con el aborto, y les diga a los asambleístas que hagan eso; el asambleísta Mauro Andino tiene una posición dogmática que no quiere ceder, y esperamos que sean los suficientemente sensibles por el bien del país”. Asimismo, aclaró que “ningún médico quiere renunciar, nos están obligando a hacerlo”.

Pese a esta postura, la atención a los pacientes se desarrolla con normalidad, aunque rechazan la posibilidad de ser reemplazados de forma masiva por médicos extranjeros, tal como lo anunció Correa en su enlace ciudadano. “El perjudicado sería el paciente, esa no es la solución, ningún extranjero, si no viene con fuero diplomático, querrá ejercer en el Ecuador con ese tipo de legislación, eso el presidente debe tener claro y hacerse asesorar adecuadamente de este tema”.

Pero esta preocupación se extiende a los médicos privados. Frank Serpa, cirujano privado, afirmó que este tipo de ley es un riesgo, y se siente apenado por la postura de los asambleístas.

En tanto, en el hospital Eugenio Espejo, se desarrolla una Asamblea General de médicos de diferentes casas asistenciales, mientras que, de forma paralela, expresiones de rechazo a la legislación se muestran en el hospitales como el Baca Ortiz, en donde los galenos colocaron sus mandiles en los ventanales y cercos exteriores del edificio.