¿Cómo logrará Guillermo Lasso gobernar frente a una Asamblea fragmentada?

Para el presidente electo, Guillermo Lasso, nada ha sido fácil en su camino hacia Carondelet. Luego de una larga campaña electoral que duró 10 años finalmente resultó ser el huésped elegido.  Ahora que llegó al poder, el reto es mantenerse, y encontrar acuerdos que le permitan gobernar, pues el próximo 14 de mayo, será su primera prueba de fuego, cuando la nueva Asamblea Nacional inicie funciones, esta vez  ninguna tienda política tiene mayoría, y menos aún la que él lidera.  

 

Entonces, ¿cómo logrará Lasso aprobar iniciativas y proyectos frente a una Asamblea fragmentada?  ¿cuáles serán las bancadas políticas claves?

 

Veamos. Para aprobar leyes  o incluso dar luz verde al presupuesto General del Estado se necesita una mayoría simple de 69 legisladores, la mitad más uno, según expone la Ley de la Función Legislativa. El movimiento Creando Oportunidades (CREO) obtuvo tan solo 12 curules, es decir, el 8.75% de representación legislativa. Mientras que, el Partido Social Cristiano (PSC), su aliado en las elecciones presidenciales, obtuvo 18. El tablero legislativo está dominado por la coalición Unión por la Esperanza (UNES), que tiene 49 asambleístas electos, pero que igual no le bastan. Por su parte, la Izquierda Democrática y Pachakutik, que obtuvieron 18 y 27 curules ya han iniciado sus acercamientos para un tentativo acuerdo político, juntos reúnen 45 escaños. Pero las conversaciones aún continúan. Mientras que, los respaldos de 13 asambleístas independientes también están por verse. 

 

 

Para visualizar las posibles versiones que tendría el tablero legislativo, Pedro Donoso, analista político, dice que primero se debe "definir cómo va a funcionar la alianza con el partido Social Cristiano si será solo en la esfera ejecutiva o también en la legislativa, de lograr una alianza, ya serían un bloque con mayor presencia” , afirma, pues juntos sumarían 31 curules,  de esta forma podrían ser la segunda fuerza política, sin embargo,  todavía no hay ningún pronunciamiento que asegure que trabajarán juntos. 

 

Otro escenario que no sorprendería a Donoso es una futura alianza con la ID, “el bloque que podría estar más cercano a CREO-PSC es la Izquierda democrática,  y con eso ver como quedarían los números en el legislativo”. Asimismo, resalta que las alianzas también dependerán del tema a debate, de los proyectos de ley, y de las iniciativas legislativas.  

 

Si se mira al otro lado de la vereda. Las alianzas son poco probables. Aunque el expresidente Rafael Correa, manifestó que el bloque de  UNES en la próxima Asamblea no obstaculizará el trabajo  y que dará gobernabilidad al futuro primer mandatario. Sin embargo, Donoso augura que siempre serán oposición, "sin ningún lugar a dudas". 

 

Tiempo atrás

 

Es la primera vez  que el movimiento correísta no será mayoría en la Asamblea. Antes con Alianza País,  fue la fuerza política más votada de los tres últimos procesos electorales (2009, 2013 y 2017). 

 

 

Por otro lado, en este periodo el Parlamento aprobó 67 leyes, sin embargo retuvo más de 900, dice Donoso que aquello corresponde a una "deuda de producción legislativa". El analista, además, destaca que hay tres proyectos de Ley que seguramente serán prioridad bajo el acuerdo firmado por Lenín Moreno, con el Fondo Monetario Internacional que contempla una reforma laboral, de seguridad social, y  tributaria.  

 

Quién se irá con quién

 

Así la tensión se intensificará el próximo 14 de mayo, pues los partidos también buscan postular a sus candidatos para ocupar los puestos de autoridades en el legislativo. Pachakutik, con Salvador Quishpe y Guadalupe Llori, y Centro Democrático, con Pierina Correa, apuntan llegar a la Presidencia de la Asamblea. El analista, no descarta de igual forma que el partido Social Cristiano postule a Henry Kronfle para la dignidad.  Pero aún nada está escrito en piedra. 

 

Donoso recuerda que si bien la gobernabilidad en el legislativo será un reto, lejos está de ser el único. Poder cumplir las propuestas y la aplicación de un modelo en una realidad compleja se suma a los desafíos del nuevo mandatario, "estamos viviendo cinco crisis profundas: económica, social, sanitaria, una política, y una de legitimidad”.