Caso Letty Cando: El asesino confeso recibía un tratamiento por esquizofrenia
Jhonny Caiza, cerrajero de 30 años, vivía en una casa de Bellavista, norte de Quito, desde que era niño junto a su abuela, quien falleció hace poco.
Los moradores de Bellavista siguen consternados con la noticia del asesinato de Letty Cando.
Dicen que fue una sorpresa para todos los que lo conocían y aseguran que Caiza no era visto como un joven problemático.
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"Era un chico muy respetuoso, venía con nosotros a conversar sus penas, sus dolencias por la muerte de su abuelita", comentó una moradora.
Aunque reconocen que tenía un problema recurrente.
"Él tomaba mucho y buscaba a sus amigos para entretenerse en el trago", contó un vecino de Caiza.
Mientras, la Policía tiene un dato que era desconocido por sus vecinos.
"En su habitación se encontró documentos sobre un tratamiento por esquizofrenia", reveló Miguel Egas, jefe de la Dinased.
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Tenía una investigación por hostigamiento
Además, informaron que el asesino confeso de la enfermera de 33 años ya habría tenido un investigación anterior por hostigamiento a una mujer, que no prosperó.
Una jueza de Garantías Penales de Pichincha ordenó la prisión preventiva contra Johnny Caiza, dentro de la investigación por la desaparición y muerte de Letty Cando.
El sospechoso fue detenido por la Policía debido a sus respuestas confusas, además cerca de la casa del sospechoso se encontró el celular y cartera de la víctima.
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