Antes de una Asamblea Constituyente, expertos llaman a un pacto nacional para definir agendas urgentes

Si en la próxima Consulta Popular y Referéndum se aprueba la pregunta sobre una Asamblea Constituyente, Ecuador podría entrar en campaña permanente hasta 2027.

En el programa Políticamente Correcto, panelistas coincidieron en que, durante ese tiempo, la ciudadanía debería participar en un diálogo nacional para definir qué temas deben incluirse en la nueva Constitución, si la opción se aprueba el 16 de noviembre de 2026.

Pablo Lucio Paredes, exasambleísta constituyente de Montecristi en 2008 y actual director de Economía en la Universidad San Francisco de Quito, asegura que, aunque la actual Constitución tiene errores que corregir, lo primero que hace falta es un pacto nacional que defina qué es urgente y qué puede esperar.

Paredes explica que la nueva Constitución debería abrir puertas, por ejemplo, a sectores estratégicos, como el petróleo o la minería. “Hay cosas que se podrían hacer y la Constitución no lo impide, como ampliar campos petroleros. Pero también hay muchas cosas que sí deja la Constitución, pero hay falta de voluntad política para hacerlo”, dice.

En ese sentido, el exconstituyente propone que la ciudadanía elabore una lista con al menos 10 puntos urgentes para que vayan a debate en la nueva legislatura. Entre ellos, dice, mejoras económicas, seguridad social, justicia y seguridad, “así se podría evitar que la Asamblea imponga ideologías políticas sin una agenda clara”, señaló Paredes.

Augusto Barrera, exalcalde de Quito y también excoordinador de la Constitución de Montecristi, considera que no es el momento de un nuevo texto constitucional. Según explica, podrían imponerse agendas del oficialismo que no respondan a las necesidades reales del país.

Mira todos los programas de POLÍTICAMENTE CORRECTO aquí

“Noboa ya tiene mayoría en la Asamblea... Si quiere cambiar temas clave del sistema de justicia, puede hacerlo con reformas. El problema es que no quiere conversar con nadie y así nadie nos asegura que esta Constituyente sea un gran acuerdo nacional”, advierte.

Andrea González Nader, excandidata a la Presidencia, sostiene que la Constitución actual protege demasiado a criminales y que eso debe cambiarse con una nueva Carta Magna. “El parecido con el modelo venezolano es excesivo. Ecuador está en un secuestro ideológico y eso hay que cambiarlo de raíz”, señala.

González Nader confirmó que, si se aprueba la propuesta de una Constituyente, no se postulará como una de los 80 miembros. Sin embargo, pide que solo expertos en seguridad, justicia y economía se presenten como candidatos. “De lo contrario, tendremos una Asamblea dividida entre oficialistas y opositores”, dijo.

Los tres panelistas hicieron un llamado al Gobierno para que se abra más canales de conversación hacia un diálogo nacional. Según señalan, por ahora, el Ejecutivo persiste en el hermetismo.

Te puede interesar: Paro Nacional Ecuador | Un manifestante fallecido y 12 militares heridos en Cotacachi

Así sería la hoja de ruta hacia una nueva Constitución en 2027

Si el 16 de noviembre el resultado es afirmativo para una Asamblea Constituyente, Ecuador entrará en un calendario político extenso. Primero, El Consejo Nacional Electoral (CNE) tendría, desde enero de 2026, 90 días para convocar elecciones de los 80 constituyentes. Estas elecciones podrían realizarse a inicios de abril de 2026.

Lo peculiar es que la forma de elección de los constituyentes será mediante voto en plancha, es decir, solo se podrá escoger por una lista. Veinte días después de los comicios, los nuevos parlamentarios empezarían a escribir la propuesta para el nuevo texto constituyente. El plazo para su creación será de seis meses, con prórroga de dos meses.

Durante ese tiempo, el país tendría una doble legislatura. La Asamblea actual de 151 parlamentarios y la Constituyente de 80, que no tendrá plenos poderes, pero que percibirá igual sueldo y funcionará bajo el mismo reglamento.

El borrador de la Constitución debería estar listo entre octubre y diciembre de 2026 y, nuevamente el CNE debería convocar a consulta popular para que los ecuatorianos decidan si la aprueban o no.

Este proceso podría coincidir con las seccionales de febrero de 2027, en donde se elegirán a alcaldes, prefectos y consejeros de Participación Ciudadana. De ganar el SÍ, la nueva Carta Magna entraría en vigencia el 24 de mayo de ese año.

Lee aquí: Ecuador ha gastado USD 127 millones en consultas populares y referéndums desde 2018 para alejarse del modelo correísta