Las importaciones de equipos para gimnasios aumentan en el país
En un galpón en Ambato están embaladas caminadoras, bicicletas estáticas, elípticas, pesas y mancuernas.
Sus dueños iniciaron con la importación de equipos para gimnasios en 2022. Lo hicieron para surtir su cadena de gimnasios, pero ahora son proveedores en 10 provincias.
“40 % son para gimnasios nuevos y el 60 % son maquinarias para gimnasios que ya existen y que siempre quieren cambiar una maquinaria, que quieren una máquina nueva para llamar su atención", explica Roberto Díaz, Import Gym
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Las importaciones de equipos suman USD 82,5 millones desde 2021, según el Banco Central. Vienen de China, Brasil, Estados Unidos, Italia y España.
Aquí se muestran en catálogo digitales y en showrooms. En Quito una empresa lo hace en este edificio de dos plantas. Los asesores comerciales explican las características de los equipos, las novedades tecnológicas y los planes de financiamiento.
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Antes de la pandemia traían hasta cinco contenedores mensuales. Este año, subió a 12 y prevén un incremento. Esta explosión favorece a la industria local.
Metalmecánicas pasaron del montaje de estructuras para casas y locales a la fabricación de máquinas para gimnasio.
Uno de esos talleres, está en Rumiñahui, a 30 minutos de Quito. Así se ve un power rack, un press de pecho alto o unas bancas antes de ser pintados.
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Los obreros demoran una semana desde el modelaje y corte de las varas de hierro, hasta la pintura al horno.
“Éramos dos personas que empezamos a trabajar, hoy estamos con 15 empleados”, dice Fabricio Paucar de Sports Structures
La industria emplea a técnicos que arreglan máquinas de gimnasio. Revisan los componentes mecánicos y ahora, cada vez de forma más frecuente, las piezas eléctricas y electrónicas.
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Hay talleres de retapizados dedicados casi en su totalidad a cambiar la cuerina de las sillas, bancas y rodetes. Lo hacen cada seis meses.
Los importadores y fabricantes asesoran en el montaje de gimnasios. Uno básico cuesta entre USD 15 000 a 25 000.
Depende de la procedencia y calidad de los equipos. Las 200 máquinas que requieren los gimnasios masivos cuestan alrededor de USD 500 000.