Activistas, incluido Greta Thunberg, reanudan demanda climática contra Suecia
Los activistas climáticos, entre ellos Greta Thunberg, anunciaron este lunes su decisión de seguir adelante con la demanda contra el Estado sueco por su falta de acción en la crisis climática. Esta decisión se produce dos meses después de que el Tribunal Supremo de Suecia desestimara el caso en febrero, argumentando que no se cumplían los requisitos necesarios para que los ciudadanos pudieran demandar al Estado en cuestiones de política climática.
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El Tribunal Supremo y la desestimación del caso
En febrero de este año, el Tribunal Supremo de Suecia desestimó la demanda presentada contra el Estado por un particular y respaldada por más de 300 personas que se unieron en una demanda colectiva bajo el nombre de Aurora. El tribunal consideró que los requisitos para que los particulares puedan interponer demandas contra el Estado en este tipo de asuntos son muy estrictos. En su decisión, el tribunal señaló que, si bien no se cumplían los criterios en este caso, una asociación que cumpla con ciertos requisitos podría tener derecho a presentar una demanda climática. Este fallo dejó a los activistas sin la oportunidad de que la corte abordara directamente las demandas sobre el cumplimiento de los compromisos climáticos de Suecia.
La demanda climática de Aurora
La demanda inicial presentada por Aurora exigía que Suecia adoptara medidas efectivas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de acuerdo con los límites de lo técnicamente y económicamente viable. Los activistas alegan que las políticas actuales del gobierno sueco no son suficientes para cumplir con los objetivos climáticos del país ni con los compromisos adquiridos dentro de la Unión Europea. Específicamente, tanto el Consejo Sueco de Política Climática como la Agencia de Protección del Medio Ambiente han advertido que las políticas del gobierno derechista de Suecia están aumentando las emisiones y no cumplen con las metas establecidas para evitar el calentamiento global.
Respuesta del gobierno sueco
A pesar de las advertencias de los organismos medioambientales, la ministra sueca de Medio Ambiente, Romina Pourmokhtari, restó importancia a las críticas recibidas y afirmó que no estaba especialmente preocupada por los informes que sugieren que Suecia va en la dirección equivocada en términos de emisiones. Su postura refleja la postura del gobierno derechista en torno a las políticas climáticas, que algunos sectores consideran insuficientes frente a la urgencia del cambio climático.
Un futuro incierto
El caso contra Suecia se suma a una serie de demandas legales en todo el mundo que buscan hacer responsables a los gobiernos por su inacción climática. De ganar la demanda, los activistas podrían abrir un camino para que otros países enfrenten demandas similares, estableciendo un precedente legal en la lucha contra el cambio climático.
El resultado de esta demanda podría tener repercusiones importantes no solo en Suecia, sino también en el contexto global de justicia climática, al enviar un mensaje claro sobre la necesidad de que los gobiernos tomen medidas concretas y urgentes para mitigar los efectos del cambio climático y proteger a las futuras generaciones de sus consecuencias.
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