Liga de Quito, un bicampeón sin rumbo
Por más que la directiva reparta respaldos y el técnico pida calma, la realidad de Liga de Quito no se maquilla: el bicampeón ecuatoriano vive un momento preocupante, tanto en resultados como en funcionamiento.
El equipo de Pablo 'Vitamina' Sánchez no es sólido en defensa, no tiene volumen ofensivo sostenido, y su mediocampo luce confundido.
Lo más grave no es solo la posición en la tabla (cuarto con 20 puntos), sino la falta de respuestas en el campo y en el banquillo.
El empate 1-1 ante el modesto Libertad, un rival que se atrevió a jugar de igual a igual en el Rodrigo Paz, es solo la última evidencia de un equipo que se desinfla jornada a jornada.
No es casualidad que Liga haya dejado escapar seis puntos en su casa, con empates ante Vinotinto, El Nacional y ahora Libertad. Se trata del mismo estadio donde en otras épocas imponía respeto y donde hoy la hinchada silba, desespera y pide un golpe de timón.
Y no es para menos. En una fase regular que arrastra puntos al hexagonal final, cada victoria es oro. Por eso, dejar puntos en casa duele el doble.
'Vitamina' Sánchez ha intentado justificar el rendimiento con el desgaste de los dos torneos. Pero la plantilla de Liga está hecha para competir justamente en ese doble frente y en ninguno está bien. En la LigaPro va cuarto y en la Copa Libertadores se jugará su última carta: clasificar a octavos o despedirse muy pronto del torneo.
A esta altura, con apenas cinco victorias en 12 partidos del campeonato nacional, no basta con hablar de presión o de apoyo interno. Los números reflejan una caída libre que ni siquiera el título de bicampeón alcanza a amortiguar.
El tiempo para reponerse se acorta. Liga está dejando escapar mucho más que puntos: está perdiendo el respeto de sus rivales y la confianza de su gente.
Lo que más alarma a la hinchada alba es la creciente distancia con el líder. Barcelona suma 28 puntos y le ha sacado ya ocho unidades a Liga, con el que tiene un partido pendiente.
Si esa brecha se mantiene o se amplía, el margen de maniobra se achica, y la opción de llegar con ventaja al hexagonal final se esfuma.
En esta LigaPro 2025 no basta con clasificar entre los seis mejores: hay que llegar con puntos acumulados que permitan pelear por el título con ventaja.
La paciencia de la hinchada se agota. Y aunque la directiva intenta transmitir estabilidad institucional, el fútbol no se resuelve con comunicados.
Si Liga de Quito no mejora urgentemente su nivel y sus resultados, el bicampeonato solo servirá como anécdota.