Supercopa de Europa: Pacho y la ambición intacta del PSG

Willian Pacho afronta con el PSG su primer gran reto de la temporada, la Supercopa de Europa ante el Tottenham, con el objetivo de iniciar el curso levantando otro título.
Willian Pacho, defensor ecuatoriano del PSG, en una imagen de archivo.()
12 ago 2025 , 11:52
Marco Carrasco

La temporada 2025/2026 en Europa arranca este miércoles con un plato fuerte: la final de la Supercopa continental entre el monarca de la Liga de Campeones, el PSG, y el ganador de la Liga Europa, el Tottenham. Un duelo de gala en Udine, Italia, que no solo abre el curso, sino que marca el termómetro para medir las ambiciones de ambos clubes.

Para el PSG, este no es un partido más. Es el primer encuentro oficial desde aquella herida aún abierta: la derrota en la final del Mundial de Clubes ante el Chelsea. Un tropiezo que manchó una campaña casi perfecta, coronada con la Ligue 1, la Copa de Francia y, sobre todo, la Champions League.

Ahora, Luis Enrique y sus muchachos buscan dejar claro que lo del Mundial fue un accidente, no una tendencia.

Entre las figuras que saltarán al campo estará el ecuatoriano Willian Pacho, quien afronta su segunda temporada en el gigante parisino, llega con la confianza ganada en su primer año y con la experiencia de haber sido parte de un equipo campeón de Europa.

La final tiene condimentos extra. El PSG apenas ha tenido una semana de entrenamientos tras las vacaciones, sin pretemporada, lo que añade incertidumbre sobre su nivel físico y táctico.

Además, se avecina un cambio importante bajo los palos: Gianluigi Donnarumma está fuera de la convocatoria, lo que abre la puerta al joven Lucas Chevalier, fichaje récord del club para la portería.

En frente estará un Tottenham que vive un contraste curioso: celebra haber roto 17 años de sequía de títulos, pero llega debilitado por la marcha de Heung-min Son y la lesión de James Maddison. Su nuevo técnico, Thomas Frank, se estrena con la difícil misión de desafiar a un PSG que, sobre el papel, es mucho más sólido.

Para Pacho y el PSG, la misión es clara: empezar el curso enviando un mensaje contundente a Europa. No se trata solo de sumar otro trofeo para las vitrinas, sino de demostrar que la ambición sigue intacta y que la temporada pasada no fue un punto culminante, sino el inicio de un ciclo ganador.

En Ecuador, estaremos atentos. No todos los días uno de los nuestros disputa una final europea con el peso de titular y la presión de defender un título que puede marcar el rumbo del año.

Willian Pacho tiene la oportunidad de ser protagonista en un escenario de élite, y eso ya es motivo suficiente para encender la ilusión tricolor.

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