Moreno y Duque ya hablan de una "apertura gradual" de la frontera

Los presidentes de Ecuador, Lenín Moreno, y Colombia, Iván Duque, señalaron este jueves 26 de noviembre que ambos países ya trabajan en un protocolo para la reapertura de la frontera, un paso que se daría en 2021.

"Me alegra anunciar que pronto estará en marcha un protocolo para el transporte terrestre seguro entre nuestros países, pero siempre controlando la propagación del virus", dijo Moreno durante la celebración del IX Gabinete Binacional, que en esta ocasión se desarrolló de manera virtual a causa de la pandemia.

"Estamos en un proceso de reapertura gradual, progresiva y pensando en el bienestar de nuestros pueblos", acotó el mandatario colombiano.

La frontera entre Ecuador y Colombia permanece cerrada desde mediados de marzo. Solo se permite el paso al transporte comercial legalmente autorizado. 

Por otra parte, Duque aprovechó este encuentro para dar un espaldarazo a Ecuador para su ingreso en la Alianza del Pacífico, también formada por Chile, Perú y México.

"Reitero mi compromiso frente a la presidencia pro tempore que asumiré muy pronto (de la Alianza del Pacífico) de impulsar el ingreso de Ecuador", dijo.

De su lado, el mandatario ecuatoriano, Lenín Moreno, agradeció el apoyo para que su país se integre "lo más rápidamente posible a este importante organismo internacional que es la Alianza del Pacífico".

El gobernante colombiano destacó también el trabajo coordinado con Ecuador en temas de defensa y seguridad, así como en asuntos de energía, vialidad, educación, ambiente, comercio y salud.

A su turno, el presidente ecuatoriano se lamentó de que los compromisos adoptados en la declaración de Cali, el año pasado, no se hayan cumplido completamente debido a la pandemia, pues ambos países debieron reorientar recursos.

Pese a las adversidades se ejecutaron el 67 % de los compromisos en temas como el combate a la delincuencia trasnacional, el narcotráfico, la corrupción y se identificaron 63 pasos fronterizos ilegales que "ponen en riesgo a nuestros países", dijo.

Moreno comentó que 3,7 millones de personas viven en las ciudades de la región fronteriza y, en su mayoría, dependen del comercio y el turismo, dos actividades ahora prácticamente paralizadas por el cierre de la frontera debido a la pandemia.