19 nov 2013 , 12:54

Comité del Mundial Qatar garantiza seguridad de sus obreros

Amnistía Internacional reveló graves abusos contra los trabajadores en los estadios, conozca más.

El comité organizador de la Copa del Mundo de Qatar 2022 aseguró que garantizará el bienestar de sus trabajadores en los proyectos para el evento, cumpliendo tanto la ley local como los estándares internacionales.

 

En una nota de prensa, el comité agradeció la aportación de Amnistía Internacional (AI), organización que hizo público un duro informe sobre la situación de los empleados de la construcción en Qatar, en el que denuncia que los obreros sufren abusos y explotación.

 

El comité organizador "valora" las aportaciones de AI y se congratula de que se hayan reconocido sus esfuerzos para garantizar que los contratistas respeten los derechos humanos, así como "la transparencia en relación con el desarrollo y la aplicación de sus normas sobre el bienestar de los trabajadores".

 

Además, el comité admitió que la responsabilidad por el bienestar de los trabajadores es compartida por todas las partes involucradas en la cadena de contratación, incluidos el Gobierno de Qatar, los gobiernos de los países emisores de mano de obra, las agencias de colocación y las empresas que la emplean.

 

Reunión con AI

Representantes de AI y el comité organizador del Mundial se reunieron el domingo anterior en Doha, antes de que la organización defensora de los derechos humanos presentara su informe.

 

Qatar 2022 consideró el encuentro "productivo" y recordó que ya está en marcha la formación del Comité de Bienestar del Trabajador.

 

En su informe, Amnistía Internacional subrayó que los proyectos relacionados con el Mundial van mucho más allá de los estadios y los campos de entrenamiento, y pidió al Gobierno español y a las empresas españolas que están invirtiendo en Qatar, como OHL Construcción, que se comprometan a respetar los derechos humanos y a hacer un seguimiento de la situación de los derechos de sus trabajadores en el país.

 

Muchos son nepalíes y filipinos que trabajan 12 horas al día, 7 días a la semana, soportando temperaturas extremas y viviendo en condiciones penosas. Entre junio y agosto, murieron 44 trabajadores por caro cardíaco o accidentes de trabajo.

 

Noticias
Recomendadas