¿De dónde viene y hacia a dónde va lo que comemos.?

Tener conversaciones con amigos que te ponen en evidencia cosas que desconocías es tener suerte. Entre esas conversaciones, un amigo me mostró un video en el que aparece la historia de una cuchara plástica. Sí… una cuchara plástica.

 

Pero ¿qué de interesante puede tener esto?

 

 

 

 

Bueno. Son solo dos minutos en los que hacen un recuento de todo el trabajo que tiene que hacer una simple cuchara plástica para llegar a nuestras manos, lograr que la usemos una sola vez y luego botarla a la basura. 

 

El video, no solo me llevó a pensar cuánto camino tiene que recorrer esa materia prima para llegar a su objetivo final, sino que me llevó a preguntarme ¿de dónde vienen todas las cosas que uso y hacia a dónde van?

 

 

Hablo por mi, pero supongo que ustedes también lo hacen. Todos los días me encuentro en el momento en que tengo que abrir algo nuevo, una botella plástica, un paquete de galletas o un frasquito de yogur, cualquier cosa, siempre hay algo que: abrí, comí en menos de 5 minutos y boté a la basura (en mi caso lo clasifico para llevarlo a reciclar, espero que tú también al menos hayas pensado en hacerlo).

 

El tema es que nunca pensamos que ese frasco o bolsa plástica tuvo un larguísimo proceso de elaboración, que involucró extracción de materia prima o explotación de recursos naturales.

 

Para que suene más sencillo, esta explotación implica talar árboles, extraer minerales, agua, eliminar a los animales que estaban en esos terrenos explotados y luego ser llevados a fábricas que procesan esos materiales.

 

 

Pero aquí no termina todo, luego esas fábricas producen, transportan y comercializan todos esos miles de millones de botellas, bolsas y frascos para que nosotros, los expertos en consumo, tengamos los productos finales en nuestras manos.

 

Manos que destapan en segundos esas botellas, se llevan a la boca un trago- que por ahora no es amargo- consumamos en minutos lo que hay dentro y, un instante después, botar a la basura un desecho que se va a degradar en años.

 

 

 

La historia de la cuchara es interesante porque nos habla del tiempo, de la plata, energía y recursos que lleva la elaboración de una simple cuchara plástica que es totalmente innecesaria usarla, cuando podríamos usar una de acero, que se puede lavar y reutilizar.

 

El caso de la cuchara no es más que un ejemplo del objeto más sencillo, pero representa a los millones de objetos y que usamos a diario sin pensar de dónde vinieron y hacia dónde irán a parar.

 

 

No quiero sonar catedrática o consejera, ojalá todos tengamos esto claro para no tener que decirlo de esta manera: Antes de usar algo, asegurémonos:

1. si vale la pena usarlo 2. si es posible reutilizarlo 3. si es factible reciclarlo y 4. Averigüemos a dónde podemos llevarlo.

 

El planeta parece tan grande para nosotros, pero es tan pequeño cuando caemos en cuenta que ya somos demasiados aquí adentro sin hacer nada al respecto.

 

Te recomiendo este otro video: La historia de las cosas (en su versión subtitulada). No es reciente, sin embargo, no lo recomiendo por su novedad, mas si por su importancia.

 

 

 

 

El video de la Historia de la cuchara es una campaña de Greenpeace, de finales del año pasado. Recomiendo también seguirlos, así como a otras organizaciones dedicadas a la preservación del planeta, tanto dentro como fuera del Ecuador.