Lo que revela tu forma de discutir en pareja sobre tu infancia según terapeutas
¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertas discusiones con tu pareja te afectan de una manera tan profunda? Según la terapeuta de pareja, psicóloga y sexóloga Nerea Rodríguez, la respuesta reside en las experiencias de nuestra infancia. La terapeuta Rodríguez enfatiza que reconocer este vínculo es el primer paso crucial para mejorar no solo la dinámica de la relación, sino también nuestro propio bienestar emocional.
Este autoconocimiento es indispensable. Como bien señala la experta, trabajar en nosotros mismos antes de siquiera considerar una relación de pareja nos prepara para gestionar mejor las diversas situaciones que se presenten, especialmente aquellas que implican conflicto.
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Las consecuencias de no sanar los traumas de la niñez son vastas y pueden manifestarse de múltiples formas en nuestras relaciones adultas. Desde la dificultad para establecer lazos cercanos o confiar en los demás, hasta la represión o exageración de emociones, la ansiedad por abandono, la tendencia a dar en exceso o incluso la codependencia. Estas son señales claras de que el pasado sigue influyendo en el presente.
Si en la infancia hubo escasez de afecto, es posible que, ante una abundancia de amor en la adultez, se genere desconfianza o la sensación de no ser digno de tal cariño. Los celos son otro factor, por ejemplo, si hubo infidelidades parentales, es fácil proyectar esos miedos en la relación actual, interpretando cualquier ausencia o comportamiento como una amenaza.
Todos estos factores, según la experta, no solo impiden que una relación prospere, sino que también desestabilizan nuestro propio funcionamiento emocional. Reconocer y trabajar en estos patrones no es solo un acto de amor hacia nuestra pareja, sino una inversión fundamental en nuestra propia paz mental.
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