Glas responde a declaración de Moreno de que "cada vez el dedo" lo apunta más
Reveló que conocía en junio informe de responsabilidad penal de bloque Singue.
El vicepresidente de la República, , respondió la mañana de este sábado 5 de agosto de 2017 a las declaraciones del presidente Lenín Moreno de la tarde del viernes en las que manifestaba que “lastimosamente, ingeniero Jorge Glas, e”.
“Ayer el presidente dijo que más dedos apuntan a mí, ¿cuál dedo? ¿el dedo de Capaya? ¿el dedo de un delator de Odebrecht? ¿O el dedo de Gustavo Larrea? ¿O el dedo de Eduardo Mangas?”, manifestó Glas desde El Guabito, en Portoviejo, provincia de Manabí.
“Presidente Moreno, ¿qué dedo me acusa o acaso me está acusando de algo?”, manifestó.
Insistió en que él no tiene miedo, que quiere que avancen lo más rápido las investigaciones.
Durante su intervención, el vicepresidente reveló que conocía desde el 16 de junio de 2017 del informe de responsabilidad penal de Contraloría por el contrato petrolero en bloque Singue. Según Glas, el propio presidente Moreno se lo comentó y le dijo que hable con Gustavo Larrea.
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La Fiscalía General del Estado anunció el 3 de agosto el inicio de una indagación previa a los contratos petroleros en la Amazonía ecuatoriana, entre el Estado y el consorcio DGC, tras recibir un informe de la Contraloría General del Estado, que señala indicios de responsabilidad penal en dicha contratación.
El fiscal general Carlos Baca dijo en esa fecha que este es el primer caso que ha recibido de Contraloría en el que se establece presuntos indicios de responsabilidad penal de Glas por peculado.
Desde Portoviejo, el segundo mandatario se defendió de estas acusaciones.
La noche de este viernes 4 de agosto de 2017 el diario O Globo, de Brasil, publicó la , audio que el segundo mandatario ya advirtió que conocía.
La noche del jueves 3 de agosto de 2017 el mismo medio de comunicación difundió una investigación titulada: .
Glas, la mañana de este sábado, calificó de “espionaje político” a esos audios y difundió durante su discurso uno de ellos. Insistió en que sus manos están limpias y que el delator de la compañía brasileña es un “preso que quiere la cabeza del vicepresidente para que le rebajen la pena”.