Honduras acuerda con el gobierno de Trump continuar con las extradiciones
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, anunció este martes 18 de febrero que su gobierno ha llegado a un acuerdo con la administración de Donald Trump para mantener el tratado de extradición de narcotraficantes a Estados Unidos.
El acuerdo se alcanza a solo diez días de que el tratado expirara, tras haber sido denunciado por el propio gobierno hondureño en agosto pasado, en medio de acusaciones de un supuesto intento de “golpe de Estado” orquestado desde Washington.
"Anuncio que he llegado a un acuerdo con la nueva administración de los Estados Unidos para que el Tratado de Extradición continúe con las salvaguardas necesarias para el Estado de Honduras, garantizando su aplicación objetiva", expresó Castro en su cuenta de X.
Antecedentes de la crisis diplomática
El tratado de extradición entre ambos países, vigente desde 2012, ha permitido la entrega de más de 50 narcotraficantes hondureños a Estados Unidos desde 2014. Entre ellos destaca el expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2022), quien fue extraditado en 2022 y condenado en junio de 2024 a 45 años de cárcel por narcotráfico.
El conflicto con EE. UU. estalló en agosto de 2024, cuando la embajadora estadounidense en Tegucigalpa, Laura Dogu, criticó un encuentro entre jefes militares hondureños y un ministro venezolano sancionado por narcotráfico.
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En respuesta, Castro denunció el tratado, alegando que Washington estaba utilizando la extradición como un mecanismo de presión y asegurando que existía un plan para derrocarla, similar al golpe de Estado que en 2009 sacó del poder a su esposo, Manuel Zelaya.
La decisión de la mandataria generó preocupación en la comunidad internacional y fue vista por la oposición como un intento de proteger a miembros de su gobierno y su círculo cercano de posibles extradiciones.
Impacto del acuerdo con Trump
El acuerdo con EE. UU., que revierte la cancelación del tratado, implica que Honduras seguirá enviando a narcotraficantes a Estados Unidos para ser juzgados.
"He asegurado el respeto a la integridad de las Fuerzas Armadas", afirmó Castro, sugiriendo que su gobierno logró garantías de no interferencia en asuntos internos a cambio de mantener la cooperación con Washington.
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Aún no se han revelado los detalles específicos del nuevo acuerdo, pero se espera que en los próximos días ambos gobiernos den a conocer las modificaciones que permitirán su continuidad.
Este movimiento de Castro marca un giro en su relación con EE. UU., en un contexto donde la administración de Donald Trump ha endurecido su política de seguridad y lucha contra el narcotráfico en la región.