Un nuevo incendio aviva la emergencia en Los Ángeles tras una semana de devastación
Los Ángeles enfrenta una nueva amenaza, este miércoles 22 de enero, un incendio de rápida propagación, denominado Hughes, se desató en el norte de Castaic, en el condado de Los Ángeles, arrasando más de 2 000 hectáreas en apenas dos horas, informó el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire). Los fuertes vientos han agravado la situación, obligando a evacuar a más de 19 000 personas en las áreas cercanas al lago Castaic.
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La emergencia ocurre tras días de avances en la contención de los devastadores incendios que comenzaron el pasado 7 de enero. Estas catástrofes, consideradas ya uno de los peores desastres naturales en la historia reciente de Estados Unidos, han dejado 28 muertos, más de 16 500 hectáreas arrasadas, 15 000 estructuras destruidas y la evacuación de más de 150 mil personas.
El impacto acumulado de los incendios
El incendio Palisades, que destruyó más de 9 300 hectáreas, ha sido contenido en un 68 %, mientras que el Eaton, en Pasadena, con más de 5 600 hectáreas afectadas, se encuentra extinto en un 91 %. A pesar de estos progresos, la aparición del Hughes pone en jaque los esfuerzos de contención en la región.
El clima continúa siendo un enemigo, El Servicio Nacional de Meteorología (NWS) ha emitido una alerta por condiciones climáticas críticas hasta el jueves, con rachas de viento que podrían alcanzar los 80 kilómetros por hora en los condados de Los Ángeles y Ventura, lo que aumenta el riesgo de propagación de las llamas.
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Los incendios que asolan el sur de California ya han devastado comunidades enteras y dejado una tragedia histórica e imborrable en la región. Las autoridades y los bomberos continúan trabajando sin descanso para proteger vidas y propiedades frente a esta emergencia.